Los vecinos de Valladares no pueden llegar a pie hasta el nuevo hospital

brais cedeira VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

Están al lado, pero no pueden cruzar al recinto del Álvaro Cunqueiro

24 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos de la parroquia de Valladares no pueden acceder andando al nuevo Hospital Álvaro Cunqueiro, que se halla a escasos cinco minutos de las primeras casas del barrio y que, de hecho, tiene un 20 % de su terreno dentro de la propia parroquia.

Las asociaciones de vecinos de las parroquias de Valladares, Matamá y Beade se unen para protestar por las consecuencias que las nuevas infraestructuras del hospital están provocando en sus áreas urbanas. Desde la de Valladares se lamenta lo difícil que les está resultando acceder al recinto. Vecinos como Rodrigo Pérez denuncian que no existe ningún lugar desde el que acceder al nuevo hospital, situado al otro lado del vial Clara Campoamor. «De esa forma, solo nos quedan dos opciones: usar el parking del hospital o ir en Vitrasa hasta la parada de la plaza de América, donde se coge la línea», lamenta.

Tras dejar atrás la rotonda de ese vial, en la que se asciende al hospital por la tercera salida, la carretera sigue pero la calzada desaparece: solamente se puede acceder desde Valladares desde una estrecha carretera que desemboca en la rotonda a los pies del Hospital, aunque actualmente se halla en obras y se convierte en una calle de un solo sentido.

En el caso de tener que emplear la línea H, la única lanzadera que lleva al hospital, los vecinos de Valladares tendrían que coger en primer lugar la línea L7 hasta la Plaza de América y luego la propia lanzadera al Álvaro Cunqueiro. Tardarían una hora y quince minutos en llegar a un hospital.

La presidenta de la asociación de vecinos de Valladares, Ana Pérez Davila, denuncia que la situación, de no revertirse, afectará a cerca de 7.000 vecinos: «Se non se vai poder ir a pé, o problema radica en que o parking sexa de pago. ¿Como pode ser que case te obriguen a ir a un parking que hai que pagar?», denuncia Pérez.

«Aguantaremos dos semanas, pero sino vemos respuesta, es probable que haya manifestaciones en la calzada», asegura Amparo Orge, una vecina. Las tres parroquias esperan respuesta de la Xunta y del Concello.