Los bomberos de Vigo se preparan para hacer frente al fuego en rascacielos

Carlos Punzón
C. Punzón VIGO

VIGO

Comprueban equipos e instalaciones de unas de las torres más altas de la ciudad en un ejercicio previsto antes del incendio de Londres

16 jun 2017 . Actualizado a las 22:25 h.

Estaba prevista antes de que las llamas arrasasen la Torre Grenfell de Londres, pero la presencia de los bomberos en uno de los edificios más altos de Vigo, ha suscitado hoy la expectación de los viandantes en el centro de la ciudad durante buena parte de la mañana. La colocación de un camión escalera desplegado ante las Torres Ifer,en García Barbón, y una columna de agua brotando desde los pisos más altos, acabaron por añadir curiosidad a los peatones, ajenos a que efectivos del cuerpo de bomberos local estaban llevando a cabo un ejercicio práctico ante un hipotético incendio en una de las construcciones más llamativas de Vigo, formada por 17 plantas de viviendas, cuatro de entresuelo (en las que se ubica el Círculo de Empresarios de Galicia-Club Financiero de Vigo) y, cuatro plantas más de garaje.

El ejercicio surgió por acuerdo de la comunidad de propietarios de las torres y los bomberos vigueses, para facilitar el entrenamiento de los efectivos en edificios de notable altura, a los que no pueden llegar los camiones escalera de mayores dimensiones del parque local, y para revisar, a cambio, las condiciones de los dispositivos antincendios y planes de evacuación del edificio.

«Estaba previsto mucho antes del incendio de Londres, pues llevamos unos meses colaborando», indica Jesús Domínguez, presidente de la comunidad de vecinos. «A nosotros nos interesa saber cómo estamos de preparados ante una incidencia, y a ellos, a los bomberos, actuar y probar unas instalaciones como las nuestras», explica el representante vecinal.

Una columna de agua que emanó desde los pisos superiores se convirtió en la prueba positiva que determinó el correcto funcionamiento de la columna de agua del edificio, las tuberías interiores colocadas para subir agua mediante una bomba de presión exterior a las plantas superiores en caso de necesidad. 

«Estamos muy sensibilizados y siempre he tenido la preocupación de que todo funcione correctamente, ya que las escaleras de los bomberos no pueden llegar a los pisos más altos», añade Domínguez, que lleva 14 años como presidente de las dos torres visibles desde gran parte de la ciudad. La presencia de los bomberos fue advertida días antes a los vecinos del inmueble, a los que además se le recordó todo el dispositivo existente en el inmueble a la hora de actuar ante un posible incendio: detectores de humos y alarmas en zonas comunes, también en las cocinas de cada vivienda y garajes; pulsadores de aviso de alarma; detectores de gases en los párkings; extintores normales en los espacios de paso y especiales en las zonas de aparcamiento; carteles, salidas de emergencia y el funcionamiento de las bombas de achique en los sótanos pasaron la revisión de los bomberos, quienes recomendaron revisar pequeñas anomalías en las indicaciones interiores de la construcción, que se convertirá más veces en escenario real de pruebas para los bomberos vigueses.