«Si pierdes la curiosidad por las cosas empiezas a envejecer»

antonio nespereira OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Además de médico, cultiva otras muchas facetas, como las bellas artes

09 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La conversación con Roberto Vila Rodríguez (Monforte, 1941) fluye por diversos cauces, todos ellos fecundos: medicina, arte, actitudes ante la vida, etc. La sección se queda corta para incluir ideas y opiniones, incluso para glosar sus vivencias. Roberto es cirujano «por verdadera vocación, pero a lo largo de la vida se fueron despertando otras inquietudes», entre ellas la música, la literatura, la pintura (también es licenciado en Bellas Artes), el cine clásico, la gastronomía o la jardinería y la horticultura. Pese a ese compendio de aficiones dice que no se siente agobiado, «pero sí tengo todo el día ocupado».

Da la sensación de conversar con un humanista, incluso un hombre del Renacimiento, cosa que a él le «ruboriza», incluso matiza que «ya quisiera», entre otras cosas porque hace especial hincapié en que no le apetece dar la sensación de petulante. Retoma la sabiduría de Gregorio Marañón para explicar, como él, que «hay que buscar alternativas en la vida a tu propio ejercicio diario» y cree que «el médico no debe quedarse solo en su profesión».

Pese a sus muchas ocupaciones, dice «no ir al galope, pero sí al trote acompasado». Su actividad médica, a la que dedica la mayor parte de la jornada, sigue siendo «una ciencia interesantísima», recomienda que el médico «aprenda a ser un humanista» y, sobre todo, «que se siente ante el paciente y lo escuche, porque tiempo siempre hay». Se deshace en elogios sobre la práctica de la medicina en sus distintos campos, subrayando que «es muy agradecida, a pesar de las limitaciones».

La vida

Ourense es una provincia que arrastra un déficit demográfico muy importante, que envejece a pasos agigantados. La reflexión que hace Roberto Vila sobre ello le da pie para ver la botella medio llena, señalando que «con edades avanzadas, sabidurías avanzadas». Dice que, por término general, el ourensano goza de una buena calidad de vida «y es una maravilla escuchar a personas mayores dando consejos y la seguridad con la que los transmiten». Sostiene que «si pierdes la curiosidad por las cosas, empiezas a envejecer», algo que él cultiva desde joven y trata de transmitir a los suyos.

Sobre la educación cree que el profesor «debe analizar a cada alumno para que este descubra muchas cosas interesantes». El interés por lo que le rodea, la curiosidad del aprendizaje y estar siempre atento al entorno siguen siendo sus preferencias, como también el compromiso público. Hizo una intentona política en la Transición para ser senador de UCD después de una invitación que le hizo Franqueira. Aquello sencillamente no cuajó y se limita a matizar que «como experiencia me pareció interesante».

Roberto Vila Rodríguez.

70 años.

Médico.

La avenida de la Habana, lugar en el que tiene la consulta desde hace 30 años.