Fernández Lores reconoce que el mobiliario de corte industrial «foi unha decisión desafortunada»

PONTEVEDRA CIUDAD
El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, admitió ayer que el mobiliario urbano de acero no se seguirá instalando y que incluso se retirará de las pocas zonas donde lo hay, como las calles Frei Tomás de Sarria y Enrique Labarta, Michelena y Riestra o la avenida de A Coruña. Lores reconoció que la elección de los bancos y papeleras de línea industrial «foi unha decisión desafortunada, que claramente non gustou aos pontevedreses». El alcalde hizo esta valoración en el curso de una visita a las obras de la calle Monteleón, donde una vecina le pidió que no coloque ese tipo de bancos. «Non o vamos a colocar máis», señaló el alcalde, que por ello recibió la felicitación de su interlocutora.
Sobre las obras que se ejecutan en la calle Monteleón -que comunica el paseo de Colón con Orillamar y es una de las pendientes más pronunciadas de toda la ciudad-, el alcalde subrayó que se consiguió solventar un «grave problema» de conexión de aguas que ocasionaban problemas a los vecinos del barrio cuando llueve con intensidad.
Esta obra se enmarca en el proyecto de recuperación del arrabal de Santa María, que financia la Consellería de Vivenda e Solo en colaboración con el Concello de Pontevedra.