Los británicos Stereolab actúan esta noche en el Pazo da Cultura dentro del ciclo Pecados dedicado a la música independiente
21 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.El Pazo da Cultura acoge esta noche una actuación tremendamente especial para los seguidores del pop independientes. Se trata de Stereolab, el grupo británico liderado por Tim Gane y Laetitia Sadier que están considerados como una de las piezas fundamentales del pop de las dos últimas décadas. La cita será a las 21 horas. Las entradas cuestan 12 euros anticipadas y 15 en taquilla.
-Stereolab hace de la experimentación algo accesible y del pop algo vanguardista. ¿Continúa siendo esta la guía del grupo?
-Se trata simplemente de nuestra versión de la música pop. Me gusta juguetear con melodías y loops melódicos, tratar de llevarlos hacia reinos tal vez inexplorados en el pop y quizá, concebir nuevas asociaciones. Pero aún así, practicamos pop, de la manera en que lo entendemos. Sigue siendo la música con mayores posibilidades de desvío.
-Mezclan sonidos antagónicos, el lounge o el kraut-rock. ¿Se sienten una bandqa posmoderna?
-Nunca pensé que nuestra música fuera de ninguna manera posmoderna, o vinculada al saber. No, nuestra música es directa, formada a partir de la pasión y de la curiosidad. Se me ocurrió que sería fascinante reconciliar y fundir elementos diferentes que nunca escuchaba juntos en mi entorno personal. Y fue la tentantiva de dichas posibilidades la que seguramente el nuevo paisaje sonoro.
-Sobre ello, ¿existe en vuestra música una labor de arqueología musical y de fans?
-Soy un pirado de la música y eso encamina también mi deseo de hacerla. Nunca fui un oyente pasivo, siempre quise participar en ella.
-«Chemical Chrods» el disco que traen ahora de giraes el disco más pop de vuestra carrera ¿Lo ven así?
-Tiene más brillo y forma pop que otros, en efecto. Pero esa apreciación es algo engañoso y que se puede interpretar de un modo engañoso y sesgados, porque los arreglos de nuestros otros discos querían imitar la parte de mercurio líquido del sonido pop. Intentaron suscitar en las canciones resonancias internas que se irradiasen hacia afuera.
- Un single como «Three Women» tiene todo para entrar a la primera. Se decía en España que los álbumes de Stereolab tenían siempre dos canciones accesibles y luego el resto más experimental y para iniciados en la banda. ¿Comparten esta apreciación?
-Por supuesto que no. Nada es para iniciados o para principiantes. No me importa si los críticos no se interesan por el conjunto y sólo escuchan dos canciones que han elegido como singles. Se comportan como ineptos haciendo eso, y no muestran ninguna preocupación por entender un nuevo lenguaje de una banda y de su música.
-Hay quien dice que vuestro discurso está agotado, que solo pueden reincidir en vuestro propio sonido, sin novedades.
-Nunca había escuchado tal cosa.
-Se les considera uno de los paradigmas del pop independiente de los noventa. Pero ese pop es especial. ¿Qué es el pop para vosotros?
-El pop es ilimitado. Se construye con elementos simples que producen unha extraordinaria radiación de sonido, que resuena a través de la estratosfera y causa además pequeñas explosiones en nuestra mente.
-Su disco más clásico, «Emperor Tomato Ketchup,» fue editado en la época en pleno auge el brit-pop. Tenía enormes posibilidades pero no cuajó comercialmente. ¿Cómo se sentían cuando Oasis eran considerados la mejor banda del planeta?
-Bueno, la verdad es que nunca tuvimos interés en aquel sujeto [se refiere a Liam Gallaguer, cantante de Oasis] y tampoco supimos mucho de ese hecho que comentas.