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Varios jugadores del Teucro han tenido que recurrir a sus familiares para comer

Xabi Otero PONTEVEDRA/LA VOZ.

PONTEVEDRA

La situación de algunos es límite, pero confían en que la junta consiga desbloquear la situación tras pagar a Hacienda

12 ene 2011 . Actualizado a las 09:20 h.

Las reuniones de la junta directiva del Teucro con los jugadores continuó ayer. Mikel Unanue, Bozalongo, Calderón y Aitor Borrás, los primeros en escuchar las posibles salidas a la crisis de boca del presidente, comprenden que tenga que ser Hacienda la primera en cobrar para desbloquear la situación y poder acabar con los impagos de dos meses y medio.

Todos lo están pasando mal, pero unos más que otros, y han tenido que recurrir a sus familiares para poder comer y atender los pagos cotidianos. «Valoro positivamente que sean transparentes con nosotros y por eso les doy mi voto de confianza», recalca Unanue.

«Cuando cogieron el club se encontraron una situación delicada porque ya llevábamos mes y medio sin cobrar. Nos preguntaron por nuestras inquietudes, se preocuparon por saber como estamos y nos aclararon las perspectivas de futuro. Ahora urge pagar a Hacienda y a partir de ahí podrán recaudar dinero para hacer frente a los demás pagos», puntualiza.

Además, asegura que su posición no es tan delicada como la de otros compañeros. «Por ahora aún tengo para comer. Todos lo estamos pasando muy mal porque hay más gastos que la comida y para mí, que llevo diez años independizado, no es agradable pedirle ayuda a mi padre. Aún no lo he tenido que hacer, pero a ver hasta cuándo puedo aguantar», comenta.

Y reconoce que el Teucro lo acabará pagando. «Todos los días se habla del mismo tema en el vestuario y puede influir, aunque, por ahora, al equipo lo veo bien», dice.

Bozalongo lo pasa muy mal

Mientras, Bozalongo declara que «la directiva se está esforzando y ha realizado un acercamiento con estas reuniones individuales. Entiendo que no nos puedan pagar hasta que se pongan al día con Hacienda y lleguen las subvenciones».

Acerca de su situación personal defiende que «ninguno cobra lo suficiente como para permitirse estar varios meses sin cobrar. Lo poco que teníamos ahorrado ya se ha ido porque, entre otras cosas, algunos hemos viajado hasta casa».

En una línea similar explica que «he tenido unas Navidades muy austeras. Le he hecho un regalo a mi hermano porque era su cumpleaños y no he podido darle nada al resto de mi familia. Estamos muy mal económicamente». Y aclaro que «tengo 25 años y tenía una independencia económica con la que ya no cuento. He tenido que recurrir a mis familiares, porque no me van a dejar pasar hambre, pero no es una situación fácil y no sé cuanto tiempo podré soportar esto».

Y concluye que «una de dos, nos pagan o esto estalla. Tenemos que tratar de mantener la unidad del equipo, pero nos va a afectar porque no puedes tener la cabeza 100% en el partido».