Sanxenxo necesita una avenida recta de más de 500 metros para la meta
10 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Con la negociación cerrada para que las Rías Baixas sea protagonista de tres etapas de la Vuelta Ciclista a España 2012, ahora toca pedalear varios puertos de montaña para que nada falle en la organización de una de las competiciones ciclistas más importantes de Europa. Los ciclistas lucirán sus respectivas equipaciones a lo largo de la práctica totalidad de los municipios costeros de la provincia pontevedresa. Restan algo más de ocho meses. Todo tendrá que estar en su lugar el 28 de agosto. Ponteareas será el punto de partida de la décima etapa de la Vuelta, y Sanxenxo será la meta.
Una avenida recta con un mínimo de 500 metros para acoger la línea de meta.
Cuando la Vuelta 2012 llegue a Sanxenxo, el municipio turístico por excelencia tendrá una población cinco o seis veces mayor que la habitual. Ocurrirá en pleno verano. Para instalar la línea de meta, la empresa organizadora del evento, Unipúblic, exige para ello una avenida recta de más de 500 metros lineales, y un mínimo de 20 metros de ancho en la calzada.
Además, para acoger la meta se necesita que en esa avenida o calle se puedan desviar los vehículos de la prueba unos 200 metros antes de la línea de llegada. El lugar elegido será decisión de Unipúblic, pero, al mismo tiempo, se pactará con la Diputación de Pontevedra, organismo que firmó un convenio de colaboración con la empresa para que la Vuelta regrese a Pontevedra. Ya se barajan opciones.
Vallado y suministros.
También se requieren otros 300 metros de longitud que rebasen la línea de meta. Es un espacio que vallarán los organizadores. Además de este tramo, también habrá vallas a ambos lados de la carretera desde un kilómetro antes de la llegada. En este área, habrá espacio para vehículos de invitados, zonas para los medios de comunicación y la zona de aparcamiento por equipos, entre otros servicios. Es previsible que estos mismos requisitos se establezcan en la ciudad de Pontevedra.
En la edición de este año de la Vuelta Ciclista a España, la avenida de Lugo fue el escenario de la línea de meta. La calle reúne las condiciones que demandaban los organizadores. El municipio capitalino repetirá como meta de nuevo este año en virtud de un acuerdo que ultima el Concello. Será el escenario de llegada de una contrarreloj individual que se disputará el 29 de agosto. Es la contra correspondiente a la decimoprimera etapa, que saldrá de Cambados.
12.000 metros en Cambados para la salida de la contrarreloj.
Toda gran carrera ciclista debe tener al menos una etapa contrarreloj. En La Vuelta, una de estas cronos tendrá su epicentro en Cambados. Para ubicar el arco de salida, los responsables de la competición ciclista demandan un espacio de al menos 12.000 metros cuadrados. Uno de los lugares que más posibilidades tiene de albergar la salida de la crono es la plaza de Fefiñáns, un conjunto histórico que se comenzó a construir en el reinado de Felipe II.
Otros 12.000 metros requeridos en Vilagarcía y 200 vallas.
La Vuelta a España abandonará el inigualable escaparate de las Rías Baixas el 30 de agosto. Pero antes de dejar la provincia, la decimosegunda etapa tendrá como marco de salida a Vilagarcía de Arousa. Aquí también se necesitan otros 12.000 metros cuadrados de espacio para instalar la línea de salida de una etapa que concluirá ya en la provincia de A Coruña. Hay varios lugares que cumplen con ese requisito en este municipio arousano, como por ejemplo, la zona portuaria. Se exigen además 200 vallas de obra sin publicidad para acotar determinadas zonas, y que la calzada por donde transcurra el recorrido neutralizado esté completamente libre de hierbajos y tierra para evitar accidentes.