El primer concierto de la programación del tercer Festival Via Stellae, protagonizado por Les Musiciens du Louvre en el Auditorio de Galicia, mantuvo ayer el nivel de expectación entre el público mostrado en la jornada inaugural, en la que cien aficionados no pudieron disfrutar de la actuación en San Martiño Pinario. Aunque ayer el concierto era de pago, de nuevo unas 800 personas no quisieron perderse la actuación de unas de las orquestas más versátiles y entusiastas del panorama actual, dirigida por una figura como Marc Minkovski, aclamado como «mágico» en ediciones anteriores del festival, y que para esta ocasión traía en las partituras a uno de sus especialistas: Jean-Philippe Rameau con su Otra sinfonía imaginaria .
También el concerto express , en el monasterio de San Martiño Pinario, protagonizado por el cuarteto de contrabajo Gravissimo, volvió a despertar el interés del público, con casi 200 personas llenando el recinto. El director de Via Stellae, José Víctor Carou, no disimulaba su satisfacción por el magnífico arranque de la tercera edición del festival, que traerá este verano 85 conciertos a Compostela y otras urbes y villas del Camino.
Carou considera inevitable que alguna gente, como en el concierto inaugural, se quede fuera, puesto que se escoge un tipo de música para cada espacio. El responsable de Via Stellae cree que esta acogida del público y de la crítica obedece a la calidad de las propuestas y los intérpretes. «Parece que a estrutura está consolidada e o público así o respalda», señala, recordando una anécdota en la edición del año pasado, cuando un crítico de Madrid le comentó que tenía la sensación de estar en un festival con once o doce años de vida. Entiende que la descentralización también es «un argumento poderoso». «Isto enriquece toda a programación, pero Santiago como centro ten unha importancia primordial. Como meta final dos camiños debe ser o piar principal de toda a programación», añadió.
El inicial éxito de esta edición no le impide a Carou y su equipo de colaboradores trabajar ya de cara al 2009 y, sobre todo, al 2010, puesto que la encomienda del Xacobeo y de la Consellería de Innovación es hacer un gran festival para el año santo. El director adelantó que «haberá grandes nomes e figuras e unha diversificación aínda maior dos espazos», y para el 2009 una programación especial dedicada a Haendel y Haydn en el aniversario de los dos compositores.