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El Plan Xeral del Concello de Touro recibe la aprobación definitiva de la Xunta

La Voz

SANTIAGO

11 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La Xunta de Galicia ha dado el visto bueno definitivo al Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) del Concello de Touro, lo que pone fin a un proceso iniciado hace más de una década con la redacción del correspondiente proyecto. La aprobación final se ha resuelto después de que los técnicos de Urbanismo de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas cotejasen que el Ayuntamiento, que dirige Ignacio Codesido (PP), realizó todas las modificaciones indicadas en un informe emitido hace un año, cuando la Xunta, entonces en manos del bipartito que formaron el PSdeG y el BNG, denegó la aprobación definitiva al planeamiento urbanístico.

Los cambios que tuvo que resolver el equipo redactor del PXOM de Touro se centraron en la clasificación y determinaciones de categorías de suelos, y en las limitaciones establecidas para la instalación de torretas y de bases de telefonía en el territorio municipal. Asimismo, el Concello tuvo que aportar determinada documentación para que el departamento de Urbanismo de la Xunta otorgase la aprobación definitiva al Plan Xeral.

Las directrices contenidas en el planeamiento se aplicarán en sustitución de las normas provinciales que, con carácter subsidiario, rigen el desarrollo urbanístico de Touro desde el año 1991. La entrada en vigor del PXOM se hará efectiva un mes después de que el documento se publique en el Diario Oficial de Galicia (DOG). La Xunta de Galicia dio a conocer ayer la orden de aprobación definitiva del Plan Xeral de Touro, de la que también tuvieron conocimiento en el Concello. El alcalde expresó su satisfacción por la decisión a tenor de las dificultades que se interpusieron durante todo el proceso, además de por la importancia de contar con unas normas de desarrollo urbanístico actuales. Ignacio Codesido quiso agradecer la celeridad con la que el nuevo gobierno autonómico resolvió la aprobación definitiva toda vez que el Concello había ratificado los cambios exigidos el pasado octubre.