Un grupo de investigadores de la Universidade de Santiago (USC) está trabajando en un proyecto para mediar en las rupturas de pareja, tanto en separaciones como en divorcios. Se trata de un modelo pionero en España.
Los datos que maneja el equipo que lidera el catedrático de Psicología Gonzalo Serrano Martínez provienen de los centros de mediación familiar de Galicia y del Servicio de Mediación Familiar de Lisboa. Revelan que la falta de comunicación es un motivo presente en el 65% de las rupturas. La incompatibilidad personal y el desamor también son razones comunes, ya que subyacen en el 63% y 53% de los casos, respectivamente.
El modelo se basa en la mediación para la resolución de conflictos. Las investigaciones demuestran que en ese proceso son claves las habilidades sociales de los propios mediadores. La capacidad de comunicación, la transmisión de confianza, la capacidad de empatía, la habilidad para persuadir, etcétera, influyen más que la formación del mediador.
También se sabe que las causas de la ruptura son cruciales para poder poner en práctica la mediación. La edad, el sexo, el nivel cultural y económico son otros factores que juegan un papel importante en la ruptura de las parejas. Según los datos, el 80% de quienes terminan la mediación valoran muy positivamente el proceso y el acuerdo al que llegaron.