El recinto registró el primer lleno del verano en la única actuación prevista en España de la banda
18 jul 2009 . Actualizado a las 02:50 h.El trío británico Keane (pronúnciese Quin, como el diminutivo usado por el ex líder nacionalista Anxo Quintana), abrió ayer la temporada de conciertos en el escenario veraniego más emblemático de Vigo, el auditorio del Parque de Castrelos. La banda llegó en forma tras pasar dos días de descanso en Ibiza, donde el martes participó en el festival del Ibiza Rocks Hotel. El grupo llegó por la tarde a Vigo en avión y como auténticos ingleses, cenaron a las seis y pudieron probar, como auténticos gallegos, la empanada que les ofreció la producción local, que también atendió sus sencillas peticiones: postales de la ciudad y sellos. El grupo vigués Niño y Pistola abrió la velada mientras se fue llenando el recinto con una fauna heterogénea y fans en primera fila que se apostaron en el parque desde la mañana.
El hecho de que Vigo fuera la única plaza que tienen programada en España este verano (aunque hoy tocan en Oporto), animó a muchísimos seguidores de otros puntos del país a acercarse para disfrutar de la voz del serio y entregado Tom Chaplin y las composiciones de Tim Rice-Oxley, que en los inicios de Keane fue tentado por Chris Martin para unirse a Coldplay, pero rechazó la oferta.
Aunque sus detractores les achacan una vena demasiado ñoña y un pop grandilocuente que cansa a la cuarta entrega, algo tiene esta formación que ha alcanzado varias veces el número uno en las listas de éxitos y ha despachado casi diez millones de discos entre sus tres trabajos de estudio. Desde luego, en Vigo demostraron su profesionalidad, perfección en la ejecución de los temas e intensidad al interpretar sus himnos más famosos, -como Somewhere only we know , This is the last time, Everybody's changing o Bend and break - que fueron coreados y ambientados por las luces de los móviles. También dieron rienda suelta a su faceta más movida, la que plasman en su último disco, Perfect simmetry , un álbum con temas que invitan a bailar, como Spiralling , y que introduce el sonido de la guitarra junto a influencias funky y reminiscencias ochenteras. No solo hubo melancolía y baladas tristes. Keane, en Vigo, fue una fiesta.