Cuba y Venezuela acordaron ayer unir esfuerzos en materia de educación sexual al terminar en La Habana un congreso sobre educación sexual. El plan pretende impulsar la educación sexual «como política de Estado e identificar dificultades en la materia», según explicó Mariela Castro, directora del Centro Nacional de Educación Sexual cubano, que firmó el acuerdo con la defensora del pueblo de Venezuela, Gabriela Ramírez.
El Centro de Educación Sexual de Cuba, creado en 1989, promueve reformas legales a favor de las minorías sexuales, como un cambio del código de familia que permita la unión legal de los homosexuales y el reconocimiento de derechos de los transexuales.
El acuerdo será propuesto a otros países de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), integrada también por Ecuador, Bolivia, Nicaragua y varias islas del Caribe.