Un anciano sacrifica su vida por la de su nieto atrapado en un agujero
La Voz
Bajo un bloque de cemento se encuentra una trampa mortal. Aparece el cuerpo de un hombre semienterrado. Los servicios de emergencia intentan abrir hueco para sacarle a él y para lo que no se ve. Porque bajo la tierra el hombre sujeta a un pequeño de año y medio. Su nieto. Así ha estado toda la noche. Agarrándole, intentando que el pequeño no cayese más por este hueco de 30 metros de profundidad. Se cayó entre el pozo y la tierra. La misma que ahora intentan abrir a golpe de excavadora y de pala. Calculan a qué altura puede encontrarse y pican sobre ella. Y para sorpresa ante ellos aparece la cara de un niño asustado, pero vivo. Rápidamente le cubren para trasladarle al hospital. Atrás queda su trampa y un abuelo que se dejó la vida por el.
09 ago 2013 . Actualizado a las 14:46 h.