El pleno extraordinario debatió el caso de la alcaldesa y los ocho ediles que se fueron del PP, a los que aún no está claro si designar como no adscritos o como agrupación
14 may 2009 . Actualizado a las 11:36 h.Ocho ediles sin partido. Un gobierno que no tiene nombre. Así es la política, que con pasos de gigante deja atrás todas las palabras conocidas hasta ahora. Las revisiones del secretario Fernando, el nombre más repetido en el pleno de la moción de censura, a toda la documentación posible dejó ayer con la duda sobre la nueva designación que recibirá en el gobierno. Su baja del Partido Popular se formalizó en el pleno extraordinario celebrado en el Concello, pese a que en la web municipal aún aparecen bajo estas siglas, por lo que «cautelarmente» ya no se pueden considerar de la agrupación.
La semana pasada se barajó la idea de que formaran parte de los no adscritos, una designación que compartirían con Gerardo Alonso, escindido ya hace tiempo de las filas de los socialistas. Pero, según se pudo discernir durante la pasada sesión, los ediles pueden seguir funcionando como grupo municipal. Claro, lo que se dice claro, tampoco está. «Penso que Ángel Ballesteros se refire nese punto ao Grupo mixto, pero creo que neste caso non poden seguir funcionando nin como partido nin como grupo», apuntaba ayer José Manuel Ojea.
«Cautelar»
Mientras la oposición volvía a criticar la situación mosense, los ediles del gobierno recordaron que la baja era solo «cautelar» y la regidora aseguró que independientemente de las consideraciones, el funcionamiento de su equipo seguirá siendo el mismo. Total, que a partir de ahora las palabras gobierno y oposición tomarán un nuevo significado en el Concello de Mos, ya que se convertirán en el único identificativo posible para definir a unos y otros sin aludir a su ideología política o su función dentro del funcionamiento municipal.
Además de tratar este tema, la corta sesión, a la que solo asistieron dos personas como público, debatió también la cesión de la nave de Draka Cables S.A. a la firma Redphone Galicia S.L. El cambio de titulares, que podrían asumir parte de los trabajadores de la anterior firma, no ha provocado una modificación en las características del contrato, por lo que se volverá a alquilar por 15.000 euros anuales tanto nave como terrenos.
Pese a las diferencias a la hora de solicitar una valoración del estado actual de la nave y otros aspectos que presentó el grupo nacionalista, lo cierto es que todos se felicitaron de que la firma que se ha trasladado no provoque molestias a los vecinos que residen en la zona. La empresa contará con el beneficio de tener todos sus vehículos de transporte matriculados en el municipio, lo que repercutirá positivamente en las arcas municipales. La cesión fue finalmente aprobada por mayoría absoluta.