El edificio se abrió el día 26 con la asistencia del presidente de la Xunta, pero la placa se colocó después con data del 27 y solo con el nombre del alcalde
29 abr 2011 . Actualizado a las 17:14 h.El alcalde del Concello de Vigo y el presidente de la Xunta, las dos instituciones que han financiado la construcción del auditorio Mar de Vigo, en Beiramar, inauguraron el principal recinto cultural de la ciudad el pasado sábado. Ambos recorrieron las instalaciones, asistieron a una actuación del club de gimnasia rítmica Maniotas, a unas canciones de Luz Casal en el enorme vestíbulo y pronunciaron sendos discursos.
Así lo recogen los periódicos del domingo, que igualmente dan cuenta de la falta de sintonía entre el alcalde de la mayor ciudad gallega y el presidente de la Xunta en sus parlamentos. Acabados estos, finalizó el acto.
Sorprendentemente, al día siguiente en su acceso lucía una placa que ha provocado la enésima polémica política. En ella figura exclusivamente como político que inauguró el auditorio el alcalde Abel Caballero y como fecha el domingo 27, cuando ya los periódicos daban cuenta de que el acto se había celebrado el día anterior. Por si existía alguna duda de tipo terminológico la agenda oficial del alcalde lo aclara todavía más. En el listado de actividades del sábado figura a las ocho de la tarde el «acto de inauguración do Auditorio Pazo de Congresos Mar de Vigo, avenida de Beiramar 61». Al día siguiente, domingo 27, Caballero también tenía una inauguración, la humanización de la avenida de Galicia, y de nuevo a las ocho de la tarde vuelta al auditorio donde «o alcalde asiste ao concerto de Luz Casal».
Esta sorprendente situación provocó ayer una fuerte irritación en la oposición popular, que calificó la actuación de Caballero de «cobardía política», estimando que «no se atrevió a descubrir una placa y lo hizo a escondidas del presidente de la Xunta». Posiblemente los populares no se habían percatado aún del cambio de fecha.
Pese a ello, consideran lo ocurrido «una falta de respeto institucional y un gesto ridículo e impropio de un alcalde serio». Para la oposición «Caballero está más preocupado en atribuirse obras que no son suyas, descubrir placas y hacerse fotografías como el único protagonista, y se olvida que el auditorio no es exclusiva del Concello».
Añaden el dato de que la Xunta aportó 25 millones y el Concello, una cifra superior a los 18 del Concello, y que «Caballero se olvida de que gracias a Corina Porro se firmó un convenio de colaboración entre ambas administraciones cuando era alcaldesa. Da la impresión de que está desorientado», concluye la nota.