Al menos 40 vecinos lo boicotearon con ruido de sirenas, gritos y la exhibición de pancartas y carteles.
12 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Un nutrido grupo de afectados por el vigente Plan Xeral en la parroquia de Sárdoma le amargó al alcalde de Vigo el acto preelectoral que celebró a media tarde de ayer. Abel Caballero acudió con varios concejales para explicar las inversiones realizadas por el Concello, principalmente en mejora de aceras y reformas de colegios públicos.
Sin embargo, 40 vecinos lo boicotearon con ruido de sirenas, gritos y la exhibición de pancartas y carteles. «Son solo diez», dijo Caballero, que menospreció a La Voz asegurando: «Ese periódico va a decir que son 300».
Los afectados por el Plan Xeral llevan años protestando contra el planeamiento urbanístico, especialmente después de que Caballero lo aprobara en un pleno cerrado al público.
El de ayer ha sido el primer incidente en una campaña que en Vigo se prevé tensa debido al sesgo localista que le ha imprimido el alcalde. Caballero lleva dos años culpando de todos los males a la Xunta e incluso a la Diputación, hasta el punto de que dejó fuera de la placa del auditorio recientemente inaugurado al presidente Feijoo. Sorprendentemente, la Xunta había aportado más fondos que el propio Concello vigués.