Fapas emprende un proyecto para recuperar el águila pescadora en el Eo
A Mariña
17 Sep 2010. Actualizado a las 02:00 h.
La oenegé Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas), responsable, entre otros, del proyecto de conservación del oso pardo cantábrico, va a emprender una nueva actuación, consistente en tratar de recuperar las águilas pescadoras en la ría de Ribadeo y de que regresen definitivamente a la costa cantábrica.
El proyecto fue presentado ayer, en un acto en el que participaron Roberto Hartasánchez, presidente de Fapas, y Doriana Pando, bióloga y principal responsable de esta nueva línea de actuación. También estuvieron presentes responsables de Norfor -empresa la sección forestal de Ence-; el presidente de la comunidade montes en mano común de Ove, Gonzalo García Marcos; varios comuneros y propietarios de montes, y el concejal de UPRI, Francisco Rivas.
El águila pescadora es un ave rapaz de tamaño medio, con alas fuertes que en vuelo se asemeja a una gaviota. Se alimenta exclusivamente de peces y está documentado que hasta mediados del siglo pasado criaba en la costa cantábrica. Es un ave gran migradora, que entre los meses de agosto y octubre viaja desde los países nórdicos hasta el África subsahariana, si bien cada vez más efectivos europeos se quedan en el sureste español. Los ejemplares adultos regresan entre febrero y marzo, para criar. En la actualidad hay al menos dos águilas pescadoras que ya recalan en Asturias para invernar, en la Ría de Villaviciosa y en la desembocadura del Río Nalón. Fapas los controla y ahora pretende avanzar en la recuperación de esta especie como nidificante.
Grandes árboles
Según explicaron ayer Roberto Hartasánchez y Doriana Pando, en colaboración con Norfor, la comunidad de montes de Ove y propietarios a títulos particular, se van a buscar grandes árboles próximos a la ría, previsiblemente eucaliptos dado que son los que más abundan, y se colocarán nidos artificiales. La esperanza es que sean avistados por las águilas pescadoras en su periplo migratorio y que poco a poco se vayan asentando en la zona.
Los reclamos se instalarán en puntos estratégicos, poco frecuentados, lo que unido a la abundancia de pescado en la ría puede ser decisivo para que el águila pescadora regrese a la costa de Ribadeo.
La iniciativa se completará con una exposición del trabajo que está desarrollando Fapas en este y otros proyectos, que en su momento se instalará en el Hotel O Cabazo.
Desde la comunidad de montes de Ove, Gonzalo García Marcos ofreció todo su apoyo y puso la iniciativa como ejemplo de lo que se puede hacer en positivo por el medio ambiente, sin un elevado coste. En contraposición criticó con dureza a la concejalía de Medio Ambiente de Ribadeo y, en particular, a las jornadas que estos días se celebran en la localidad.