«Estoy investigando para hacer un color Pepa Poch Sargadelos»
A Mariña
Becada por Pierre Cardin, ha residido y expuesto en varios países, y estos días prepara nuevas obras en la fábrica de Cervo
18 Dec 2016. Actualizado a las 05:00 h.
Enfrascada en sus creaciones descubrimos en la planta de producción de Sargadelos (Cervo) a la creadora Pepa Poch (Barcelona, 1960). La pintora, exmiembro de International Colour Authority, con sede en Londres -compañía que elige las tendencias de color para todo el mundo- ha vivido y expuesto su obra en medio mundo. Recién llegada de Nueva York, el pasado día 1 aterrizó en A Mariña, donde prepara nuevas obras. Hasta febrero o marzo compaginará sus trabajos en Cervo y en A Coruña. Después, regresará a Estados Unidos. Satisfecha de haber creado estilo, Poch se declara una creadora universal.
-En el 2011 colaboró con Sargadelos, ¿qué proyectos la han traído de nuevo a Galicia?
-Lo mío es una historia romántica con la porcelana y la cerámica. Amo este tipo de escultura, porque además es arte para utilizarlo. Hice una cena en Nueva York rodeada de mis cuadros y de la vajilla de cerámica de mi propia casa. Llevé dos soperas que quedaban de la época que hice en Sada en el 2011 para la exposición de Sargadelos en Barcelona. ¡Las soperas triunfaron muchísimo! Los invitados vieron que habían salido en Elle y en varias publicaciones de decoración. Tras varios viajes, el Real Círculo Artístico de Barcelona me ha hecho ahora un encargo de una parte del edificio para cenas de arte y para recibir a gente de todo el mundo. Ahora estoy empezando a crear el espacio, pero una de las creaciones son las vajillas de Pepa Poch de arte. Ya he empezado a trabajar con el azul cobalto, que es un color que a todos los artistas nos apasiona. Es la profundidad, es el mar, es el cielo... Yo quería volver a Sargadelos y el Real Círculo Artístico de Barcelona y Sargadelos se han puesto de acuerdo con un encargo para que yo trabaje aquí.
-¿Tiene otros proyectos aquí?
-Estoy realizando unas creaciones por otro encargo de la Casa Museo Picasso de A Coruña, donde voy a exponer. En enero voy a llevar a A Coruña cinco piezas de parte de la obra que ya expuse en Nueva York. También estoy creando otras líneas para Nueva York.
-¿Qué le inspira de Sargadelos?
-Sargadelos viene del arte. Viene de un marqués que sabía lo que eran las vajillas antiguas y el color en la porcelana, de otros artistas como Díaz Pardo y Seoane y, en definitiva, Sargadelos es muy Galicia. Me siento muy identificada con las mujeres que trabajan en Sargadelos. Les haría un homenaje.
-¿Por qué se identifica con ellas?
-Porque transmiten un gran amor por las piezas. Creo que si tú no la amas, la porcelana te rechaza, se rompe, se parte. Yo voy al límite con la porcelana. A ver quién puede más de las dos.
-Esta pieza es un ejemplo (mostrando una de las bandejas sobre la mesa de trabajo)...
-Efectivamente. Estoy trabajando en ello y en febrero haremos una súper presentación de piezas casi imposibles. Empecé hace diez años a ondular los platos y ahora ya un plato ondulado no dice nada. Y si hay una pieza muy Pepa Poch es el grial, que en Sargadelos también está. Galicia para mi es un descubrimiento y la descubrí cuando vine a Sargadelos. Galicia me recuerda mucho a París y la luz que encuentro aquí, sobre todo en A Coruña, es muy de París.
-Tras años difíciles para Sargadelos, ¿cuál cree que es el valor de futuro de esta cerámica?
-Es una artesanía muy profesional. Sargadelos tiene alma, es como el alma de Galicia. Es un sello de identificación que en muchos países no existe y os copiarán por ahí porque la gente necesita algo, una referencia. Estoy creando otros colores y en Sargadelos estoy investigando una paleta para hacer un color Pepa Poch Sargadelos. Aquí tengo un campo infinitivo, un campo que no se acaba.
«Me siento muy identificada con las mujeres que trabajan en Sargadelos»
«Voy a pintar en un estudio de A Coruña una obra que presentaré en Arco, en Madrid»
-¿Qué proyectos la esperan en A Coruña?
-Estoy arreglando un estudio para pintar en A Coruña. Es un piso antiguo, precioso, grande, con los suelos de madera, con galería... He conseguido este espacio y voy a pintar en ese estudio una obra que presentaré próximamente en Madrid en la feria Arco. Es al lado de la casa donde vivía Picasso. Mi relación es ahora muy intensa con el tema Picasso en A Coruña porque me han encargado en la Casa Museo una colección Pepa Poch. Mis cuadros van estar allí colgados. Soy una gran amante de la obra de Picasso y hay gente que desde hace años me llama Madame Picasso.
-¿Por qué esa atracción por el color azul cobalto?
-Es muy espiritual. Y el azul, de la manera en que yo lo trabajo, tiene muchos matices. El azul cobalto es muy profundo porque también la gente gallega es muy profunda, es de verdad. Por eso también me gusta Nueva York, con sus azules al atardecer... El otro día cuando estuve en As Catedrais casi lloro de emoción.
-¿Y por qué incorpora el color oro en estas creaciones?
-En las épocas de crisis, el oro alimenta el espíritu, es riqueza, luz, es como poder, ancestral... Nos transporta a un momento de la vida en el que ya ofreces lo máximo. Y si sacas Sargadelos ya en color oro...
-¿Será Galicia un destino al que regrese, aunque sea temporalmente, a trabajar?
-Yo vuelvo. Sargadelos tiene unas posibilidades infinitas y trabajar en A Coruña es muy creativo. No me extraña que el padre de Picasso diese clases aquí y que a Picasso le marcara su época de Galicia. Mi intención es traer a Galicia a gente de Estados Unidos que están muy interesados en saber por qué quiero estar aquí, en saber qué me atrae de Galicia.