Alcoa plantea ahora aplazar, sin fecha, el arranque de la actividad en San Cibrao

Alcoa solicitó este lunes por escrito a los trabajadores de San Cibrao y al comité de empresa «acordar retrasar» sine die el arranque de la electrolisis de la única planta de aluminio primario que queda en España. La multinacional, que se había comprometido con su plantilla a iniciar la reactivación de la factoría en este mes de enero, para alcanzar las 32 cubas operativas en abril y retomar la producción al 100 % en octubre del 2025, comunicó de forma oficial el mensaje expuesto días atrás por su jefe mundial. Bill Oplinger, en una conferencia con inversores: de encender la maquinaria, «la financiación actual» para la factoría «se agotará durante la segunda mitad del 2024», por lo que «no tiene sentido económico» cumplir con lo firmado. La compañía reclama «flexibilidad» a la parte social y pide una contestación a su «solicitud» no más tarde del miércoles. Ese mismo día, a las 10 horas, la dirección se reunirá con los sindicatos para abordar la situación.

«El complejo de San Cibrao espera incurrir en pérdidas sustanciales en el 2024 y si la situación no cambia significativamente en los meses venideros, anticipamos que la financiación actual se agotará durante la segunda mitad del año», expone Alcoa, que en diciembre había alegado ante sindicatos y Administraciones ser insolvente para cumplir con el acuerdo de viabilidad firmado con la plantilla, reclamando a Xunta y Gobierno que «explorasen todas las líneas de ayuda posibles» para una «solución a largo plazo» en Cervo. El pacto pasaba por un cese temporal de la producción en la planta de aluminio —inoperativa desde enero del 2022— a cambio de blindar los empleos y arrancar una fábrica mejorada. La empresa congeló a finales del año pasado la más importante de las inversiones, la construcción de un nuevo horno de cocción de ánodos, presupuestado en 109 millones de dólares.

«Es prudente revisar cualquier acción que podamos activar para proteger los fondos remanentes, mientras vemos si hay un plan de negocio viable», argumenta Alcoa, que afirma haber «identificado este retraso como una oportunidad» y reclama una respuesta en menos de 48 horas. «Una vez recibida, nos pondremos de nuevo en contacto a finales de esta misma semana para confirmar los próximos pasos al respecto», reza su comunicado.

El comité aceptó acudir a la reunión que tendrá, enfatizó, carácter «informativo (...) Hemos cumplido con el acuerdo y reclamamos a Alcoa que haga su parte cuanto antes, comenzando por el horno de cocción de ánodos», señaló el presidente, José Antonio Zan (CC.OO.).

El sindicalista recordó que el antiguo horno de cocción de la fábrica «ha sido demolido» por decisión de la multinacional, lo que obligaría, hasta construir el nuevo, a funcionar con ánodos de importación, a un coste elevado.

Los sindicatos solicitaron reuniones a las Administraciones para conocer el resultado «de los encuentros que han tenido con Alcoa», y saber «por qué la empresa pone encima de la mesa este intento de pacto para incumplir el acuerdo firmado».

El Gobierno, que reivindica su «firme compromiso» con la empresa y los puestos de trabajo, cita hoy al comité. Participarán en la reunión la secretaria de Estado de Industria, Rebeca Torró, y el delegado del Ejecutivo en Galicia, Pedro Blanco.

La conselleira de Economía, Industria e Innovación, María Jesús Lorenzana, reclamó a Alcoa «transparencia» y al Gobierno que convoque la mesa de seguimiento prevista con todas las partes, para que la multinacional «traslade su calendario de actuación, siempre pensando en el mantenimiento de la industria y del empleo. Estamos en un clima de inseguridad y necesitamos saber en qué podemos ayudar a la empresa», recalcó.

Los sindicatos se reunieron este lunes con el diputado del BNG en el Congreso, Néstor Rego, quien comprometió el apoyo del Bloque a una intervención pública de la planta de aluminio.

Aluminio tendrá su cuarto jefe en dos años tras irse el actual por motivos «personales»

El pasado 8 de mayo, Rubén García Almuiña asumía el cargo de jefe de la planta de aluminio de Alcoa en San Cibrao. Este lunes, nueve meses después y coincidiendo con la solicitud formal por parte de la multinacional de un cambio de planes en la hoja de ruta firmada, se supo que el ingeniero industrial deja su cargo. Renuncia «por motivos personales», aclara la compañía, que indica que el todavía dirigente será sustituido de forma interina por Joaquín Fernández, con una trayectoria de más de tres décadas en la empresa. El relevo será a finales de este mes.

Con la llegada de García Almuiña parecía resolverse la incertidumbre alrededor del liderazgo de la planta de aluminio. A su llegada ejercía el cargo de forma interina el noruego Tor Arne Berg. Había sido nombrado en noviembre del 2022, cuando una investigación interna supuso el despido del anterior responsable de la factoría. Entre los veranos del 2019 y el 2021, ejerció la jefatura de la fábrica Jesús Maroño.

Alcoa no concreta por el momento si, tras nombrar jefe interino a Fernández, busca un responsable a largo plazo para la planta de aluminio.

La incertidumbre sobre los puestos de responsabilidad en la multinacional en España no se ha limitado en los últimos meses a la jefatura de la planta de aluminio de San Cibrao. El pasado noviembre, la compañía suprimió el puesto de presidente de Alcoa España tras no continuar en el cargo Miguel López-Quesada, que había tomado posesión del mismo desde principios del 2023. Fue finalmente sustituido por Álvaro Dorado, vicepresidente global de energía.