Mesas de seguimiento revisarán el trámite de los eólicos ligados a Alcoa y de la balsa de lodos

El comité de Alcoa informó el pasado jueves por la noche de que ha acordado con las Administraciones la creación de mesas técnicas de seguimiento para supervisar la tramitación de los parques eólicos vinculados al complejo industrial de San Cibrao y a la ampliación de la balsa de lodos rojos (DBR). Los sindicatos habían solicitado con insistencia reuniones periódicas para supervisar posibles avances o retrasos en estos proyectos, considerados esenciales para el futuro de la industria del aluminio en A Mariña.

«Durante las últimas fechas se han establecido contactos con el Gobierno de España y con la Xunta de Galicia, fruto de los cuales ha quedado claro que el interés de las Administraciones y del comité es coincidente en mantener la actividad del complejo industrial en San Cibrao», expuso la representación de los trabajadores.

El presidente del comité, José Antonio Zan, señaló que sindicatos y Administraciones están «alineados» para exigirle a la empresa que cumpla todos los términos del acuerdo firmado con su plantilla y, principalmente, el horno de ánodos grandes comprometido, presupuestado en más de cien millones de dólares.

«Si Alcoa quiere vender la planta es su problema, pero tiene obligación de cumplir lo que ha firmado», señaló Zan, que puso el foco en «la inversión más importante» del acuerdo firmado con la plantilla para el cese temporal de la actividad. «De no construirse el nuevo horno de cocción de ánodos, la fábrica quedaría con un agujero» toda vez que fue demolido el viejo, recordó el sindicalista.

El comité opina además que ese horno de cocción de ánodos «es fundamental para garantizar los puestos de trabajo a corto plazo» porque entiende que el retraso en su ejecución puede llevar a que, «en breve», comiencen los despidos, especialmente en las auxiliares, encargadas de la obra. «Si no se hace, puede haber problemas laborales», insistió Zan.