La Voz de Galicia

Elisa Lamas, precursora del feminismo, y otras mariñanas en el olvido

Mondoñedo

MARTÍN FERNÁNDEZ MONDOÑEDO/LA VOZ

Además de la mindoniense, están Andrea L. Chao, Nena Acevedo, Rita Geada, Pilar Osorio, Marta F. Miranda...

10 Mar 2019. Actualizado a las 05:00 h.

Es un deber moral mantener viva la memoria. Pero no hay nada más inmoral que el uso partidista e interesado que, a veces, unos y otros hacen del pasado. Son muchas las mujeres de A Mariña que, a lo largo de cuatro años, salieron en esta serie. Elisa Lamas, Andrea L. Chao, Nena Acevedo, Rita Geada, Pilar Osorio, Marta F. Miranda, Elvira y Adelina Méndez o las gemelas Fernández de la Vega son algunas. Otras ?Camelia Cociña, María Tobío, Manuela Martínez, Clara Corral? saldrán en breve.

Todas tienen algo en común: nacieron o son hijas de A Mariña; fueron precursoras e innovadoras en su tiempo; y hoy están olvidadas, marginadas, calladas. No cumplen los requisitos de algunos misales para poder subir a ciertos altares. Debería habilitarse un lugar para el silencio. Pero, en tanto, por mucho uso interesado que se haga (o no se haga) de ellas, siguen ahí. Como decía Camus, la mejor manera de no ver el mar es darle la espalda…

Elisa Lamas, por ejemplo. Nació en Mondoñedo. Era hija del jurisconsulto Antonio Maseda Bouso y de María Arango Lamas. Estudió Derecho y, aunque nunca fue «mujer de», se casó en 1956 con Manuel Jiménez de Parga, luego rector de la Universidad de Barcelona, ministro, artífice de la Transición y presidente del Tribunal Constitucional.

En los años 60 y 70, junto a María Aurelia Capmany, Lidia Falcón, Carmen Alcalde o Magda Oranich, Elisa Lamas fue pionera del feminismo en España. Desde la entonces abierta y tolerante Barcelona, luchaba contra la marginación de las mujeres y reflejaba la injusticia y frustración en que se encontraban. Era columnista habitual de Destino, La Vanguardia y Diario16 y por su oposición al franquismo y su compromiso cívico y político fue procesada cuatro veces por el temible Tribunal de Orden Público (TOP).

Su libro Once historias perversas y una ejemplar es uno de los primeros de contenido feminista que se publicó en España. Son doce relatos breves que muestran su rebeldía y su compromiso social y político, reflejan problemas de las mujeres y critican las actitudes machistas de la sociedad. La Venganza, Pensionado suizo, Madre soltera, Una carrera brillantísima, No podemos tener más hijos, Se alquila un útero, Pobre mamá, Violación en grupo o Juana quiere ser cura ?basada en Mondoñedo? son algunos de ellos.

Elisa Lamas era una mujer de principios y convicciones religiosas aunque muy crítica con la jerarquía eclesiástica. Fue madre de siete hijos y defensora, en plena dictadura, de una España europeísta e integradora de sus distintos pueblos en un proyecto democrático, solidario y común.

En A Mariña y Galicia ?salvo un pequeño reconocimiento organizado en 2018 por la alcaldesa de Mondoñedo, Elena Candia? nadie se hizo eco de ella ni incluyó su nombre en libros, álbumes, actos, premios...

Andrea L. Chao, una maestra de Lindín en el I Congreso de Mujeres Cubanas

Andrea López Chao fue maestra de Lindín y Viloalle (Mondoñedo), profesora del Centro Gallego de La Habana y primera vicepresidenta de Hijas de Galicia, la poderosa asociación de mujeres emigrantes. Su figura está en el olvido salvo las breves pero honrosas excepciones de Prudencio Viveiro, Sonia Enjamio y González Pagés. El 27 de abril de 1898, El Regional de Lugo informaba que la Junta de Instrucción Pública la nombrara maestra de Lindín con un sueldo anual de 450 pesetas. Y el 3 de junio de 1904, El Norte de Galicia decía que «Andrea L. Chao, maestra que fue de Viloalle, fue nombrada directora del plantel de enseñanza del Centro Gallego de La Habana. Ganó la plaza por oposición y tiene un sueldo de 75 pesos oro mensuales». Allí ejerció varios años y propuso en 1924 el nombre Concepción Arenal para el centro.

La mindoniense era una mujer respetada y valorada. Según el Eco de Galicia de 22 de abril de 1923, Andrea ?que la revista presenta como «bella y culta hija de Galicia, respetable dama y señora, viuda de Ares, culta profesora y vicepresidenta de Hijas de Galicia»? participó con un discurso, que la publicación reproduce integro, en el I Congreso Nacional de Mujeres celebrado en La Habana en 1923. En él propuso defender y fortalecer el rol de la mujer en la familia pues ésta es «clave para sanear y equilibrar la sociedad».

Una actriz y una poeta de O Valadouro de gran trayectoria

Dos mujeres emigrantes de O Valadouro, la actriz Nena Acevedo y la poeta Rita Geada, tampoco tuvieron en Galicia un eco acorde con su brillante trayectoria en Cuba.

La primera, según el periodista valadourense Miguel Vila, nació en 1916 en Castro (Alfoz). Era hija de Carmen Candia Nécega, de Budián, y de José Acevedo Villar, de Santa Cruz. En una entrevista en el Diario Las Américas en 2006, la actriz decía tener una hermana llamada Maruja. A los tres años emigró con sus padres a Cuba y el 18 de marzo de 1937, según Cultura Gallega, debutó con 21 años en una velada que el Centro Gallego dedicó al Centenario de Rosalía de Castro.

El político, escritor y valadourense consorte, Ramón Fernández Mato, fue su mentor en una jornada en la que también participaron Menéndez Pidal, Mato y Gerardo Álvarez Gallego. Logró un gran éxito con sus interpretaciones de La Confidencia de Luis G. Urbina, Tierra mía de Mato, y el Romance de la loba parda.

En 1941 se integró en el Teatro Universitario de La Habana. Luego trabajó como profesora de arte dramático y triunfó en coliseos habaneros con Mujeres, Damas retiradas, Mariana Pineda, El malentendido, Las pepillas del Vedado o la zarzuela La Dolorosa. Se exilió en 1962 a Puerto Rico donde rodó la película Puerto Rico en Carnaval y en 1970 marchó a Miami. Allí orientó su carrera hacia el público infantil y obtuvo un gran éxito con su personaje El Ratón Cumbanchero. Nena Acevedo ganó en 1956 el Premio Talía del Patronato del Teatro de Cuba por su actuación en La tercera palabra y en 2007 en Miami ?donde falleció en 2011? el Premio René Ariza por «su contribución a la promoción y difusión del teatro cubano».

Rita Geada, por su parte, nació en Pinar del Río en 1934. Era hija del emigrante de Adelán (Alfoz), Juan José Geada, también escritor. Su primer libro, Develado silencio, de 1959, recibió grandes elogios de público y crítica. Se doctoró en Filosofía y Letras y marchó a Estados Unidos donde ejerció la docencia 30 años. Es autora de nueve libros de poesía, alguno premiado: Ao romper da aurora; Cuando cantan las pisadas; Mascarada; Vertizonte; Esa lluvia de fuego que nos quema; Espejo de la tierra; Y el mar sigue batiendo; y Poemas de New England. La escritora mantiene relación con A Mariña y O Valadouro donde conserva muchos primos, uno el empresario y ex alcalde de Ferreira, Enrique Geada.

 martinfvizoso@gmail.com


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