Cuando Ribadeo lució en la Volvo Ocean Race gracias a Sonia Castedo y a «Ñeti»

Sonia Castedo, exalcaldesa de Alicante, se reivindicó como ribadense el viernes pasado en la lectura del pregón de las fiestas patronales. Horas después, firmaba en el libro de honor del Real Club Náutico de Ribadeo. Y, ciertamente, Sonia Castedo ha hecho gala de su condición de ribadense en muy diversas ocasiones, haciendo ostentación de ello cuando estaba en lo mejor de su carrera política. Hay un episodio, apenas conocido, que lo ilustra bien. Fue en el año 2008. Sonia Castedo acababa de acceder a la alcaldía (lo hizo el 17 de septiembre del 2008, convirtiéndose en la primera regidora de Alicante) en sustitución de Luis Díaz Alperi, que había dimitido, y unos días después, el 11 de octubre del 2008 era la máxima representante del ayuntamiento en la salida desde el puerto alicantino de la Volvo Ocean Race 2008-2009, en la que fue la décima edición de la vuelta al mundo a vela.

Entre los competidores de aquella edición se encontraba otro ribadense de corazón ilustre (aunque nacido en Santander), Antonio Cuervas-Mons, «Ñeti», (Santander, 21 de diciembre de 1981), uno de los mejores proas oceánicos del mundo, participante habitual en la Volvo Ocean Race (con el Mapfre y Telefónica) y la regata Sídney-Hobart, considerada la travesía oceánica corta más dura del mundo, con un recorrido de 628 millas náuticas (1.164 km) entre el puerto australiano y la capital de Tasmania, que ha ganado en varias ocasiones. «Ñeti» se encuentra muy unido sentimentalmente a Ribadeo, donde reconoce que fueron sus inicios en el mundo de la vela y ha sido objeto de homenajes por parte del Real Club Náutico.

Para despedirlo en la salida de la Volvo Ocean Race se desplazaron hasta Alicante varios miembros del club náutico de Ribadeo (por entonces aún no lucía la condición de real). Acudieron con dos gallardetes (tira o faja volante con forma triangular que se pone en lo alto de los mástiles de las embarcaciones o en otras partes, como insignia, adorno, aviso o señal), de la entidad ribadense. Se encontraban entre el público, en una esquina, cuando Sonia Castedo los vio respondiendo a su llamada. Los saludó y rompiendo el protocolo fue a su encuentro. Tras charla animada le entregaron el gallardete que ella se puso a los hombros y lució aquel día con el nombre del Club Náutico de Ribadeo. Ñeti, por su parte, lo izó a un mástil, donde estuvo ondeando varios días para orgullo de los ribadenses y sorpresa de quienes se preguntaban el origen de aquella banderola que lucía al lado de otras de países y multinacionales.

Son dos detalles, anécdotas, a las que Sonia Castedo no se refirió en su pregón, aunque podría haberlo hecho, probablemente por entender que no tenía mayor importancia, pero que demuestra que el ser y proclamarse ribadense son más que frases, es un sentimiento.

Llevando la terminología de la náutica al automovilismo, se podría decir que la Volvo Ocean Race (la vuelta al mundo a vela) sería un rali, con largas etapas, mientras que la Copa América sería la Formula Uno, con carreras más cortas. Con las regatas olímpicas, son las tres competiciones más importantes del mundo de vela.