Raúl López posee más del 40 % de las acciones del Obra

Cerca de cuarenta accionistas asistieron ayer a la asamblea general ordinaria del Obradoiro CAB y conocieron el balance económico de la entidad antes de su conversión en sociedad anónima deportiva. A 30 de junio del 2012, justo antes de esa conversión, el valor neto del club era negativo por 1.334.208 euros pero, según comentó el presidente, Raúl López, a día de hoy «esa deuda ya está saldada». La asamblea aprobó todos los puntos del balance económico de la temporada 2011-12 sin ningún reparo de los asistentes.

El consejo de administración presidido por Raúl López, que estuvo acompañado por José Manuel Rivera, Rafael Silva, Óscar Rodríguez y el director general y deportivo del club, José Luis Mateo, también dio a conocer quienes son, por porcentaje de acciones, los principales propietarios del club. Se trata de Transportes Urbanos de Cuenca S.L., una de las compañías del grupo empresarial que preside Raúl López, con el 23 %; Castromil S.A., también del holding del máximo mandatario del Obra, con el 11 %; los socios del Obradoiro CAB, que eran apenas unos doscientos, con el 10 %; y la compañía gestora del complejo deportivo de Sar y Santa Isabel, Xade, de la que también es titular mayoritario el presidente del grupo Monbus, con el 7 %. Estos son los accionistas que poseen más del 5 % de los títulos, los restantes están por debajo de ese porcentaje.

El punto del orden del día que más debate generó fue el del convenio de colaboración con la fundación Fedesa, antiguo Rosalía de Castro y que también aglutina al Club de Baloncesto Pío XII. Este apartado no llegó a someterse a votación, porque la iniciativa del consejo de administración del Obradoiro para firmar este convenio con Fedesa para gestionar las categorías inferiores de ambas entidades deportivas tuvo el rechazo de los antiguos socios del Obradoiro CAB, titular de la cantera. Estos consideraron que es interesante seguir defendiendo la marca Obradoiro sin diluirla en la de otra entidad. Entre los que tomaron la palabra para defender este argumento se encontraba el anterior presidente obradoirista, José Ángel Docobo, quien afirmó que si los socios lucharon durante veinte años para mantener el club y sacarlo adelante hay que intentar pelear por las categorías inferiores de la entidad. Raúl López señaló que es conveniente disponer de una fundación para obtener ventajas fiscales en los patrocinios y mecenazgos de empresas que deseen colaborar.

Pepe Casal, otro histórico del Obra, dijo que él había creado una fundación hace unos años y que se la cede al club sin ningún compromiso si este lo considera oportuno. En la asamblea se acordó crear una comisión paritaria entre consejo y socios para determinar cómo se gestionará la cantera del club.