El concello de Vilagarcía recicló en 2010 más de 37 toneladas de residuos
Arousa
03 Jul 2011. Actualizado a las 06:00 h.
El servicio municipal de recogida de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) que funciona en Vilagarcía desde el 2009, ha cerrado la memoria de 2010 con un balance de 37.680 kilos de residuos recogidos para su posterior reciclaje. Además, hasta el mes de mayo ya se han contabilizado 13.670 kilos más de estos materiales.
Los vecinos de Vilagarcía pueden depositar sus deshechos eléctricos y electrónicos en el Punto Limpio de Pinar do Rei habilitado para tal actividad. Allí, los operarios separan los residuos y los almacenan en cinco categorías dependiendo de sus características. Más tarde, una empresa autorizada se encarga de gestionar el material.
Con esta iniciativa, promovida desde el departamento municipal de Medio Ambiente, el Concello intenta promover entre los ciudadanos conductas ecológicas, facilitando su implicación en políticas de cuidado del medio ambiente y en el reciclaje. De este modo, se garantiza la gestión adecuada de este tipo de basura que en muchas ocasiones es contaminante, evitándose así la proliferación de vertederos incontrolados.
Esta prestación no supone ningún coste para el ayuntamiento, ya que se lleva a cabo a través de un convenio firmado con el colectivo de entidades gestoras de los sistemas integrados de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.
De hecho, a cambio de seleccionar y separar de forma adecuada los distintos tipos de aparatos y materiales que son depositados en el Punto Limpio, el Concello obtiene una contraprestación económica por parte de la empresa gestora que traslada los residuos susceptibles de ser reutilizados para reciclarlos. La tasa se abona en función del peso y el grado de separación de los residuos. De este modo, como actualmente el Ayuntamiento está almacenando los materiales en cinco grupos, el máximo nivel, la tasa se paga a 80 euros por tonelada.
De todos modos, los ingresos que recibe el Concello por llevar a cabo esta actividad son simbólicos, ya que el beneficio real de este servicio reside en las consecuencias positivas derivadas de su consecución para el mecio ambiente.