Última oportunidad para darse el atracón en la Festa do Marisco

Como cabía esperar, ayer, festivo, fue un día de abarrote en la Festa do Marisco de O Grove. A las dos de la tarde era complicado circular y encontrar un aparcamiento y las carpas de O Corgo estaban a rebosar. Y, claro, las existencias se agotaron. El lunes se terminó el cangrejo real y ayer por la tarde ya no quedaba en la despensa ni camarón ni empanada ni percebe. El pulpo á feira y el arroz de mariscos seguían liderando el ránking de ventas, aunque este año está dando la sorpresa la zamburiña, que se ha colado entre las preferencias del público. Ayer a las cinco de la tarde se habían despachado más de setecientas raciones de este bivalvo.

Hoy es la última oportunidad para disfrutar de la fiesta, y quienes hayan quedado con hambre de los sabores del mar deberán darse prisa, pues el recinto solo estará abierto al mediodía, de 11.30 a 17 horas.

A mayores de la oferta gastronómica, el Marisco ofrece otros alicientes; ayer se disputó una regata de dornas, que ganó Dorna Meca; hoy, a partir de las 10 horas se celebra la carrera del Marisco y media hora después empieza una muestra de encaje de bolillos en el pabellón de Monte da Vila. En el recinto de O Corgo continúa la exposición del colectivo Grovemakers y de la artesanía en concha de Montse Betanzos.

La actuación de Iván Ferreiro de anoche bajó el telón de los Concertos de O Marisco, que llevaron al escenario de O Grove el rock y el pop Cristina Rosenvinge y de Novedades Carmiña y el chorro de voz y la delicadeza de Dulce Pontes, entre otros artistas.

Tampoco faltaron los premios. El Lola Torres de cocina tradicional recayó este año en Casa Botín y ayer se conoció el fallo del jurado del Simposio Internacional de Escultura, que cumplió treinta años de historia. El primer premio fue para Aleksandar Eftimovski con la obra «Entwined» (Entrelazada); el segundo clasificado fue Ferhat Özgür Görel, con «Recurrence» (Reaparición), y el tercero lo ganó Christian Ignacio Alvarenga con «Flor de Piedra».