Largo desplazamiento para el Mariscos Antón, que se enfrenta en Granada al Raca

Cuando Peque Cerqueira jugó en el Cortegada, entonces Mejillón de Galicia en la que fue la primera temporada del club de Vilagarcía en la máxima categoría del baloncesto femenino nacional, Sara Gómez tenía diez años y estaba dando sus primeros botes en el pabellón de Carril, y Mercy Wanyama tenía cuatro y es probable que no tuviera constancia de lo que era una canasta. Las demás integrantes de la plantilla actual del Mariscos Antón Cortegada no habían nacido ni estaban cerca de hacerlo. Pues bien, Peque Cerqueira, veinticinco años después es una de las grandes referencias del Raca Granada, el conjunto al que hoy se miden las vilagarcianas.

Peque es una leyenda en el baloncesto femenino español y sigue impartiendo lecciones de amor por el deporte a sus 48 años. Sí, tiene 48 años y todavía es capaz de jugar más de 25 minutos de media por partido en esta Liga Femenina 2 y de ser la mejor reboteadora de su equipo.

El Raca no ha empezado nada bien la temporada, puesto que acumula cuatro derrotas. El Mariscos Antón Cortegada, por su parte, partió hacia Granada en un largo desplazamiento y con varias jugadoras entre algodones. Una de ellas, Mercy Wanyama, que sufrió un esguince el lunes y llega renqueante. Además, Nuria Chorén tampoco llega en las mejores condiciones al encuentro y Andrea, aunque viajó, será baja. Semana complicada de entrenamientos para preparar el partido, por lo tanto para Javier Nogueira, que destaca del rival su alto porcentaje en el lanzamiento exterior, de los mejores de la categoría, advierte.