PP y PSOE se enzarzan a cuenta de la cesión de los terrenos para el nuevo centro de salud

La cesión de los terrenos al Sergas para la construcción del nuevo centro de salud de Vilagarcía ha provocado un nuevo rifirrafe entre el PSOE y el PP. Los populares salieron ayer a la palestra para presumir de que gracias a sus votos favorables la iniciativa salió adelante. «El PSOE tenía ocho concejales y el BNG se abstuvo por lo que si llegamos a votar en contra no se hubiera aprobado», apuntó Ana Granja, que explicó el sentido de su voto. «Votamos a favor porque queremos que se haga un nuevo centro de salud en Vilagarcía, aunque no estamos de acuerdo con la ubicación», subrayó. Y ahí, en ese asunto de la ubicación, redundó Elena Suárez, que dijo que no creen que el lugar elegido sea el más conveniente. «Al lado del mercadillo, en un lugar en el que se organizan eventos, donde no hay aparcamientos...» recitó como argumentos en contra. Y recordaron también las concejalas populares que el PSOE lleva en su programa la peatonalización de la avenida de A Mariña, con lo que dicen «solo tendría acceso por Elpidio Villaverde, que no es una calle de titularidad municipal».

Poco tardaron los socialistas en dar la réplica. «Agora resulta que se non fose por eles, o servizo que levan boicoteando anos non sairía adiante. Se non fora porque se trata dun asunto serio, a postura do PP de Vilagarcía é xa cómica», espetó el alcalde Alberto Varela, que recordó que los populares votaron en contra de la operación financiera para la compra del solar.

Granja y Suárez, por su parte, apuntaron que la presentación del estudio de movilidad es el quinto punto del acuerdo firmado entre Concello y Xunta y que mientras no se haga no podrán comenzar las obras. «Es increíble que digan que no lo pueden hacer porque no conocen el proyecto, cuando hace unas semanas se pusieron una medalla diciendo que se habían ejecutado mejoras en él gracias a sus sugerencias», afirman. «La Policía Local preparó un informe de accesibilidad, pero que ya quedó anticuado porque fue antes de la humanización de Arcebispo Lago y del cierre de Conde Vallellano», sostienen en el PP, que acusan al gobierno local de poner en riesgo una obra para la que «la Xunta aporta catorce millones». Granja también aprovechó para recordar al PSOE el nuevo reparto de ediles. «Va siendo hora de que se den cuenta de que esto ha cambiado», dijo.