Vilagarcía adelanta el pleno de diciembre para que las ordenanzas fiscales entren en vigor en enero

El pleno ordinario que la corporación municipal de Vilagarcía debería celebrar el 26 de diciembre tendrá lugar, en realidad, el lunes anterior, el día 23. La razón de esta modificación es la necesidad de convocar una sesión extraordinaria en la que resolver las alegaciones presentadas a la revisión de las ordenanzas fiscales para el año que viene y corregir un error detectado en ellas. Este acuerdo permitirá que sean aprobadas definitivamente y puedan entrar en vigor con puntualidad en enero. Fuentes municipales explican que la decisión, adoptada por el alcalde, Alberto Varela, está avalada por el reglamento que rige la organización de los debates plenarios.

A diferencia de lo que ha ocurrido en los nueve ejercicios anteriores, en los que permanecieron congelados —a excepción de aquellos contratos que exigen la revisión del IPC—, el gobierno socialista de la ciudad ha incrementado algunas tasas e impuestos municipales con la vista puesta en el año que viene. En la mayoría de los casos, subraya Ravella, se trata de tributos que no afectan a la generalidad de los vecinos. Por ejemplo, los bienes e inmuebles de características especiales, que en Vilagarcía se reducen prácticamente a los que existen en el puerto, el impuesto de construcciones, que no se tocaba desde el 2015, y el impuesto de actividades económicas, que solo se aplica a las empresas que superan el millón de euros de facturación anual.

Sí llegará a los bolsillos, en cambio, el incremento del recibo de la basura, motivado por la nueva normativa europea, que exige que los servicios de recogida se autofinancien, y el aumento del canon de Sogama. De esta forma, una vivienda tipo pasará de pagar 53,3 euros por semestre a desembolsar 64,78. No obstante, esos doce euros de diferencia pueden verse notablemente reducidos si el usuario demuestra su participación en los planes de reciclaje de residuos orgánicos, bien a través de los contenedores marrones, bien a través del compostaje individual o colectivo.

El gobierno local subraya que, pese a la modificación de las ordenanzas, la presión fiscal en Vilagarcía «sitúase sensiblemente por baixo da media estatal do mesmo rango de municipios, cuxo promedio é de 656,48 euros fronte aos 470,90» de la ciudad.