Los comuneros de Silván alertan del colapso económico del campo de golf de Meis

El futuro del campo público de golf de Meis pinta mal, según afirman los comuneros de Silván que en su día cedieron sus territorios para la construcción de esas instalaciones deportivas. Aseguran que la deficiente gestión del recinto lo está empujando a una situación irreversible. «Non estamos falando dun problema de mala xestión; estamos falando de que aquí non hai xestión de ningún tipo», según señaló ayer Nito Abal, el portavoz de la entidad vecinal.

Esa situación se concreta en que, «desde hace años el campo esté soportando una incesante pérdida de socios» que se ha traducido en que el número de abonados «haya disminuido en un 50 %, lo que en poco tiempo hará inviable continuar con la explotación del campo de golf». La situación, dicen en el escrito remitido a los ayuntamientos implicados en el nacimiento de este recinto, es «crítica». Por eso, han convocado a representantes de Barro, Meis, Ribadumia, Cambados, Sanxenxo, Pontevedra, Meaño, Vilanova y Vilagarcía a un encuentro que se celebrará mañana, a las seis de la tarde, en Exposalnés (Cambados).

Con los representantes de los ayuntamientos quieren tratar un asunto que ya han abordado, durante casi un año de negociaciones, con el presidente de la Fundación Monte Castrove, José Luís Pérez Estévez, el alcalde popular de Meis. Esas negociaciones «non serviron de nada», afirma Nito Abal. Por esa razón, la comunidad de la que forma parte ha decidido dirigirse a todos los integrantes de la Fundación para exponerle sus argumentos.

«Desconocemos cuales son las cuentas que maneja la Fundación Monte Castrove, pero creemos que resulta necesario efectuar un estudio detallado de la situación económica del campo», dicen los comuneros en la convocatoria remitida a los ayuntamientos. Ellos aportan dos pinceladas: el canon por la cesión de los terrenos «además de no haberse actualizado desde el año 2014, incumpliendo lo pactado en la escritura de cesión, se ha rebajado un diez por ciento en la cuota mensual desde el año 2012». Lo mismo, dicen, ha sucedido con los puestos de trabajo, reservados por escrito para vecinos de la parroquia. Estos han visto como sus ingresos menguaban un 14 %. «La principal premisa para la cesión era que los puestos de trabajo que se generasen serían cubiertos preferentemente por comuneros y, en caso de que el campo cerrase, se perderían estos empleos», razonan desde la comunidad.

Rescisión del contrato

Entienden desde esta entidad que urge «la contratación de un gestor profesional con experiencia y amplio conocimiento del mundo del golf, unido a la creación de nuevas instalaciones deportivas que lo complementen», a fin de que el recinto sea el motor turístico que se proyectó en su día. Si no se adoptan medidas ya, «nos veríamos obligados a solicitar, incluso, la resolución del contrato de cesión por incumplimientos graves»