Los contenedores de la basura deben dejarse sin tapar, y los trastos y muebles viejos, en casa

La instrucción desde los concellos es clara: los contenedores de la basura deben quedar abiertos, sin tapa. Esta medida, que en circunstancias normales es del todo desaconsejable por el problema de malos olores y de salubridad que plantea, es ahora un mecanismo de defensa en la lucha contra el coronavirus. Son cientos las manos que pueden tocar la tapa de un contenedor y no hay garantías de que todos los usuarios utilicen guantes, de modo que la mejor manera de evitar contagios es depositar la bolsa de la basura directamente en el interior del recipiente, sin llegar a manipularlo. Las empresas concesionarias del servicio de recogida de residuos están actuando en consecuencia y dejan los contenedores abiertos; no es un fallo, las tapas no se deben volver a levantar.

Uno de los primeros ayuntamientos en aplicar esta medida fue el de Meis. Lo hicieron por recomendación de Protección Civil, «e vimos con agrado que outros nos copiaron», explica la alcaldesa, Marta Giráldez.

O Grove y A Illa, casos aparte

En Vilagarcía empezaron el lunes con esta práctica y el ejemplo lo siguen también en Cambados, Vilanova, Catoira, Ribadumia y Meaño. En O Grove se suman al llamamiento para que los vecinos no bajen las tapas, aunque allí no siempre es posible atenderlo. El sistema de funcionamiento de algunos contenedores impide dejarlos descubiertos y, para estos casos, el Concello insta a la población a tomar medidas de protección mediante el uso de guantes desechables y el lavado de las manos. Además, los recipientes son objeto de una desinfección diaria y la alcaldía ha dado orden de revisar todos aquellos que tienen un sistema de palanca de pie para que funcionen a la perfección.

El modelo de los contenedores de A Illa tampoco permite dejarlos a cielo abierto, de modo que desde el Concello están extremando su limpieza.

En Valga solo se dejan abiertas las tapas de los recipientes amarillos y se opta por cerrar las de los verdes para evitar malos olores, según explican desde el Concello; en estos casos, se aconseja usar guantes a la hora de tirar la basura.

Hay otras recomendaciones a tener en cuenta en estos momentos de crisis: hay que usar los contenedores solo para lo estrictamente necesario. Algunas personas aprovechan el confinamiento para realizar limpiezas a fondo de la casa, el trastero o el garaje, lo cual conlleva un incremento considerable del volumen de residuos. Esto provoca que los contenedores se llenen más rápido de lo habitual y que muchas personas se vean obligadas a dejar las bolsas con materia orgánica en la vía pública. El concejal de Medio Ambiente de Vilagarcía, Lino Mouriño, apela a la responsabilidad de todos para evitar el colapso del servicio. Vilagarcía, como A Illa y otros concellos, ha cerrado el punto limpio y ha suspendido el servicio de recogida de enseres hasta nuevo aviso, de modo que los muebles viejos y el menaje en desuso deben dejarse en casa hasta nueva orden. «Xa faremos unha recollida de voluminosos intensiva cando acabe todo isto, agora temos que centrarnos no importante», señala el edil.

Otra medida en la que están haciendo hincapié los concellos en la última semana es en la limpieza y desinfección espacios públicos y calles, para lo cual, en algunos casos, se está reforzando el personal. La prioridad absoluta es reducir las posibles vías de contagio del virus.