La Voz de Galicia

Aparece en Carril la pata amputada de un perro

Vilagarcía de Arousa

a.g. vilagarcía / la voz

La persona que la encontró buscó por la zona, pero no encontró más rastro del animal

10 Jan 2025. Actualizado a las 05:00 h.

Paseaba Liliana por Carril, por la zona que lo hace habitualmente con su perro, cuando acudió intrigada porque el can olisqueaba con fruición una zona del terreno. Cuando se acercó y vio qué había despertado el interés del animal no dio crédito. Allí, en medio de la hierba, estaba la pata amputada de un perro. Uno de buen porte, por el tamaño de la garra, y joven, según razonó ella al comprobar que las almohadillas no estaban muy gastadas.

Lo primero que se le ocurrió es que el animal hubiera podido ser víctima de un atropello y que estuviera en los alrededores agonizando o muerto, pero no vio nada. Lo siguiente fue llamar al 112 para explicar a quien atendiera el teléfono el macabro hallazgo y preguntarle qué debía hacer ante tan extraña situación. La solución que le dieron fue que se pusiera en contacto con la Policía Local de Vilagarcía, algo que hizo. Recibió un poco más tarde una llamada de vuelta de ese departamento en la que la instaban a llamar al 112, según recuerda. Es decir, a regresar a la casilla de salida, por lo que optó por ponerse en contacto con la protectora de Vilagarcía para preguntarles si les había llegado algún perro herido de tal forma que pudiera haber sido el que perdiera esa parte de su anatomía, algo que hasta ayer por la tarde, según la explicaron desde la propia protectora, no había sucedido, con lo que el misterio estaba servido.

Cuenta Liliana que ella suele pasear habitualmente con su perro por esa zona y que el miércoles, que fue la última vez que lo hizo, esa pata no estaba allí. De hecho, no parecía que llevara mucho tiempo porque ni siquiera le había dado tiempo a los insectos a dar con ella. También descarta que llegara arrastrada por el mar por la distancia que media entre el lugar en el que apareció y la línea de costa.

«Tras esperar un rato la tapé con una tabla y me fui. No sé si finalmente pasaron por allí o no», cuenta, con una mezcla de estupefacción por el hallazgo y preocupación por lo que le pudo haber pasado al animal.


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