HEMEROTECA Churchill afirma que no está dispuesto a retirarse de la actividad política

La Europa de los años 50 estaba en manos de los ancianos, siendo el más destacado de ellos el primer ministro británico, Winston Churchill, que cumplía 80 años. Frente a los que especulaban con su edad, el viejo león se vio obligado a manifestar, a mediados de octubre de 1954, en Blackpool, que no estaba dispuesto a retirarse de su puesto político y que mientras tuviese fuerzas seguiría trabajando por Inglaterra, a lo que añadió: «Perseveraré hasta lograr tanto una coexistencia pacífica con Rusia como la creación de los estados unidos de Europa». Lo más curioso es que Churchill, al que los electores británicos no votaron en las elecciones generales de 1945 porque su talante agresivo contra el comunismo no le hacía idóneo para dirigir la época de paz que se iba a iniciar en Europa tras la derrota nazi-fascista en la segunda Guerra Mundial, ahora abogaba con una coexistencia pacífica con la Unión Soviética y sus países satélites.