Los puertos pequeños están siendo los más afectados por el viento de los últimos días

Las flotas artesanales de los puertos de la comarca son las más afectadas por la fuerza el viento. La mayor parte de las embarcaciones permanecen amarradas desde el lunes y los armadores esperan que amaine durante la jornada de hoy para poder salir al mar.

Fuentes de la Cofradía de Lira indicaron que las más de veinte naves que tienen su base en esta localidad permanecen amarradas desde el viernes. Un portavoz de la entidad afirmó que situaciones como esta las viven con demasiada frecuencia durante el invierno. «Estamos acostumados», indicaron desde el pósito carnotano.

Una situación similar también la están pasando los armadores de las unidades menores de Muros. En la jornada de ayer, la actividad en el muelle de la localidad era solo de los barcos del arrastre. «Os pequenos permaneceron amarrados porque aínda había mal tempo, pero algún decidiuse a saír», comentó un representante de la cofradía.

Reparaciones

La flota del pulpo de Portosín tampoco se atrevió a salir. Las condiciones meteorológicas no lo permitieron y los armadores optaron por quedar en tierra, lo que muchos aprovecharon para hacer alguna que otra reparación.

Los naseiros de Porto do Son se unieron al resto de la flota artesanal de la comarca que siguió por segundo día consecutivo amarrada a puerto. El patrón mayor, Tomás Fajardo, comentó que el paro en la jornada de ayer fue total.

Algo parecido se vivió en el puerto aguiñense. Algunos percebeiros tan solo acudieron a faenar por tierra a la zona sur, pues era casi imposible salir en lancha del muelle de la parroquia ribeirense.

El mal tiempo también obligó a muchos mariscadores de a flote a permanecer amarrados. La mayoría de los que salieron buscaron en todo momento los lugares más abrigados para poder echar el rastro con tranquilidad.

La virulencia del temporal incluso provocó que varias embarcaciones de Ribeira que se dedican a la pesca de merluza con palangre, optasen durante la jornada de ayer por quedarse en tierra esperando a que amainase el viento.

Los marineros y productores de a flote de Barbanza pretenden regresar a la normalidad durante la jornada de hoy, pues las previsiones meteorológicas anuncian una mejoría del tiempo en el noroeste peninsular.