Juguetes, dulces y un premio de la lotería, el legado de los Reyes

El sol se dejó ver a media mañana en la comarca barbanzana. Y con él, los primeros chiquillos que desafiaron al frío para disfrutar de sus regalos de Reyes. Bicicletas, muñecas o coches teledirigidos, entre otros divertimentos, tomaron las calles en una jornada en la que no faltaron los tradicionales roscones. Pero Sus Majestades también traían en sus zurrones una grata sorpresa: un premio de la lotería del Niño. El bar Mato vendió un décimo que reportará a su poseedor un pellizco de 25.000 euros.

Las calles de Ribeira fueron testigo de un día de Reyes poco habitual: numerosos bares estaban con las verjas bajadas, la plaza del Concello estaba vacía y los parques, cerrados por las medidas anticovid, se encontraban igual. Las risas de los niños que solían estrenar sus juguetes nuevos apenas se escucharon en las vías del municipio ribeirense.

En la plaza de España, un lugar amplio en el que los más pequeños pueden disfrutar a sus anchas, sí que se vio algo más de movimiento. Durante unas horas se convirtió en un campo de fútbol en el que un niño estrenaba su balón, y en una pista de ciclismo y patinaje en el que rodaban por primera vez varias bicicletas.

Los puntos más visitados de la comarca fueron las pastelerías, ya que, como marca la tradición, había que celebrar el día con un roscón. Por eso se vieron colas de personas que esperaban su turno abrigadas para recoger su pedido y volver al calor de sus casas. Algunos establecimientos registraron un descenso en las ventas de última hora de estos dulces, aunque no de los encargos, ya que mantuvieron el nivel de años anteriores. Varios responsables de las confiterías señalaron que la variedad marcó la venta de estos postres: tanto los clásicos como los rellenos tuvieron su público.

Pellizco en Boiro

Además, la lotería del Niño volvió a dejar un pellizco en la comarca. Si el año pasado cayó el primer premio en Taragoña, esta vez fue Cespón la parroquia afortunada. El bar Mato vendió un décimo del 05587, agraciado con el tercer premio. El propietario del local, Ramón Mato, estaba muy contento porque es la primera vez que da un galardón importante de la Lotería Nacional. Aseguró que desconoce quién es la persona agraciada, aunque cree que es de la zona.

El bar Mato es muy conocido en la localidad, pues además es estanco y un punto de sellado de quinielas y primitiva. Desde que se implantaron los terminales de despacho de loterías, cuentan con una en su local, aunque «normalmente non vendemos moito xa que a xente quere ter o papel na man, pero aínda así algo despachamos». Ramón Mato indicó que hace unos 40 años sellaron una quiniela de 20 millones de las antiguas pesetas, y recientemente una bonoloto de 75.000 euros y una primitiva de 51.000.