La romería de Fruíme volvió a reunir a decenas de devotos de la Virxe das Cabezas

Muchas veces la medicina no todo lo cura, y lo único que le queda a muchos enfermos es pedirle a los santos que intercedan por ellos y les echen una mano. A eso fueron hoy decenas de devotos a Fruíme, a encomendarse a la Virxe das Cabezas para que los sane. Como su nombre indica, esta santa está especializada en dolencias como migrañas o cefaleas, «aínda que cada un vai pedir polo seu. Moita xente tamén levaba velas de pernas, corpos ou brazos», apuntó uno de los miembros de la comisión organizadora de la romería, que se celebra todos los años cada tercer domingo de septiembre.

Desde primera hora de la mañana, este núcleo lousamiano se llenó de gente que venía a venerar a la santa, y que cumplió a rajatabla con la tradición de pasar por la figura de la virgen una rama de mirto y una estampita. Además de las distintas las misas, también se celebró una solemne procesión, pero la irrupción de la lluvia provocó que la marcha religiosa tuviese que acortar su recorrido y volver con celeridad a la iglesia de San Martiño de Fruíme.

Entre los que no se quisieron perder esta celebración estaban Manuela Figueira y José Luis Blanco, dos vecinos de Cabo de Cruz que todos los años cumplen con la tradición de comprar las velas y ofrecerse a Nosa Señora das Cabezas. Sin embargo, para otros, como Clara y sus hijos Javier y Mar, de 11 y 7 años, esta fue la primera vez que participaron en la romería de Fruíme, y no dudaron en cumplir con todos los rituales.

Empanada y mejillones

Después de la procesión, la comisión de festejos repartió más de 30 kilos de mejillones al vapor y varias empanadas entre todos los vecinos y devotos que se congregaron en una carpa que se instaló para la ocasión en la zona. El grupo Tania Veiras fue el encargado de poner la música en la sesión vermú y y repetirá actuación esta noche en la verbena, en la que también se contará con la actuación de la agrupación musical Puzzle.

Las celebraciones en honor de la Virxe das Cabezas de Fruíme llegarán mañana a su fin, y la programación festiva de la jornada comenzará con las dianas y alboradas que correrán a cargo del grupo Trécola, que recorrerá las calles desde primera hora de la mañana.

Para la una de la tarde está fijada la misa en honor de San Antón, a la que seguirá la tradicional procesión siempre que el tiempo acompañe. Como colofón se celebrará —a partir de las 14.00 horas— una sesión vermú que estará amenizada por el grupo de gaitas Trécola.