Alerta por el estafador de la buena fe: pide dinero para un taxi porque llega tarde al trabajo y luego no devuelve los bízums

Vecinos de Barbanza denuncian haber sido víctimas de una estafa por exceso de buena fe. El timo, pese a no haber causado grandes pérdidas monetarias, sí ha traído consigo la indignación de la cerca de media decena de personas de Boiro y Ribeira que se han visto afectadas. Al parecer, la trampa consiste en que un hombre solicita dinero alegando que lo necesita para llegar al trabajo asegurando que lo va a devolver por Bizum aunque, finalmente, el ingreso nunca se llega a producir.

En concreto, el individuo, al que víctimas describen como un hombre de entre 25 y 35 años con perilla y cabello oscuro, se acerca a los transeúntes de forma educada para introducir el cebo. Tras esto, narra que se ha dejado el móvil olvidado en el coche de su madre y que necesita ayuda para llamarla. El siguiente paso es pedir a la persona que intente contactar con su familiar dándole un número que nunca contesta.

A continuación, fingiendo sorpresa, pide a modo de favor que le presten una cifra que puede ir desde los 10 hasta los 20 euros para coger un taxi ya que tiene que acudir al trabajo. Supuestamente, asegura no tener otros medios y que le pediría el dinero a su madre, pero al no contestar esto le resulta imposible.

Es ahí cuando llega la estafa ya que, pese a que le facilita un número de teléfono a la víctima para que lo llame y así devolverle el dinero a través de Bizum cuando recupere el móvil, el ingreso no se produce jamás.

A cualquier hora

Aunque en Ribeira se le ha visto actuar a plena luz del día, un vecino de Boiro fue víctima de la estafa después de una noche de fiesta. Según narra el hombre, que prefirió mantenerse en el anonimato, el sujeto se le acercó y le contó una historia que «parecía comprensible».

Tras esto y varias llamadas infructuosas al supuesto número de la madre, el boirense cedió y le prestó 20 euros en efectivo al sujeto que mostró su agradecimiento y su interés en devolvérselos, aunque el dinero terminó por no regresar.