La factura de la basura de Serra do Barbanza crece hasta los 4,7 millones

Por lo general, los precios de los servicios públicos que las Administraciones pagan a las concesionarias que se encargan de gestionarlos se actualiza cada año, lo que generalmente supone un mayor desembolso. Sin embargo, en el caso de los concellos que integran la mancomunidad Serra do Barbanza y envían su basura a la planta de compostaje de Servia, el encarecimiento de la recogida este año supondrá un esfuerzo importante para las arcas municipales, entre otras razones porque durante años no se aplicó la actualización de precios y la deuda se fue acumulando. Una sentencia judicial obliga a la entidad a asumir el importe que tiene pendiente con la empresa encargada de la recogida de los residuos por ese concepto, lo que significa que en este 2021 la factura se eleva por encima de los 4,7 millones de euros.

Esto supone un incremento de más de 700.000 euros con respecto a la liquidación del ejercicio anterior, una cuantía lo suficientemente importante como para obligar a los gobiernos locales de turno a buscar fórmulas para afrontar una subida que se sitúa en el 18,09 %. Noia, por su peso específico dentro de la mancomunidad -el canon a abonar se calcula en función de criterios como la población, el número de viviendas o la base imponible del IBI urbano- es también uno de los ayuntamientos que verá incrementarse la factura en mayor medida. De hecho, el aumento en el importe a pagar supera holgadamente los 120.000 euros, lo que eleva el total a 805.847.

Cerca de los 100.000 euros se sitúa el incremento del coste del servicio para el Concello de Porto do Son, que debe hacer frente a 593.655 euros, es decir, casi 50.000 euros al mes por la recogida y gestión de la basura.

Menos peso

Dentro de los ayuntamientos de pleno derecho de la mancomunidad -Ames, Rois y Pontecesures tienen un contrato firmado para la recogida de residuos, pero no forman parte de la entidad- Lousame es el de menor peso y, por tanto, la subida del canon es menos acentuada, unos 25.000 euros, con lo que la factura anual se eleva a 164.329 euros.

En total, la mancomunidad pagará este año 4.737.438 euros a la empresa concesionaria por la recogida y tratamiento de la basura.

Los concellos apuestan por asumir el coste sin repercutir la subida a los ciudadanos

Aunque el incremento de la factura por la recogida de la basura en los concellos de Serra do Barbanza es abultado, la intención de la mayoría de los gobiernos es asumir ese coste sin repercutir la subida en el recibo que pagan los ciudadanos.

Una de las razones que provocan un incremento del 18,09 % en el canon de golpe es la falta de acuerdo entre la mancomunidad y la empresa sobre cómo debían actualizarse los precios, lo que derivó en un largo proceso judicial que perdió Serra do Barbanza, por lo que alcaldes como el sonense Luis Oujo, que además es presidente de turno de la entidad, creen que los vecinos no tienen que pagar los platos rotos de la falta de entendimiento entre las partes. Además, y en ello coinciden otros regidores, dada la situación de crisis derivada de la pandemia, considera que no es buen momento para subir tasas, de manera que el coste añadido se asumirá con los presupuestos.

El gobierno de Noia ya ha previsto ese gasto a mayores en sus cuentas, como explicó el alcalde, Santiago Freire, en el último pleno, mientras que la regidora de Muros, Inés Monteagudo, coincide en que no están las cosas como para cargar aún más las tintas sobre los contribuyentes: «A nosa intención é tratar de asumir a suba con recursos propios do Concello e non repercutir o gasto nos recibos que pagan os veciños».