Ribeira, primera parada de dos nuevos buques de la Armada

La Armada española está de estreno. El miércoles partían del astillero Rodman dos nuevas patrulleras rumbo al puerto deportivo de Ribeira, donde atracaron a las 18.20 horas. Este no era su destino final, sino que fue una parada estratégica en su camino. Las nuevas embarcaciones de la Armada tendrán su puerto base en la Escuela de Especialidades de la Estación Naval de la Graña (Ferrol), dirección hacia la que partieron ayer antes incluso de que saliera el sol.

Las tripulaciones de los buques, quince hombres entre oficiales y alumnos, apenas pisaron tierra ya que los barcos están totalmente equipados. «Tienen una gran autonomía. La capacidad del combustible es muy grande, por lo que solo se dependería de los víveres», explicó el teniente de navío, José Antonio Tórtola, que comandaba las patrulleras. El trayecto que separa los astilleros Rodman, situados en Moaña, del puerto deportivo de Ribeira lo cubrieron en apenas dos horas a pesar de encontrarse con mar de fondo a la altura de Costa da Vela. «Los barcos dieron buenas sensaciones. Son pequeños y de motor van muy bien», contó Tórtola.

La parada que realizaron las patrulleras en Ribeira la calificó como estratégica. «Es el primer puerto en el que amarramos. Fue una decisión que tomamos por horario. Queríamos navegar lo mínimo posible de noche», concretó el teniente de navío. Los miembros de la Armada fueron recibidos por el presidente del Club Náutico de Ribeira, José Luis Torres Colomer.

Para entrenamientos

Las patrulleras llevan los nombres de dos maestros de la marinería, según precisó el teniente de navío Tórtola: Pérez Verdú y Bustelo Pavón. El homenaje a estas figuras históricas se cierra con la función que tendrán los buques, ya que en ellos se formarán las futuras generaciones de la Armada. Los alumnos de la Escuela de Especialidades de la Estación Naval de la Graña sumarán experiencias a bordo de los barcos de 22 metros de eslora.

«Tienen una buena capacidad, en total podrían ir en cada una 16 alumnos, dependiendo del adiestramiento», apuntó el teniente de navío. Los estudiantes recibirán formación en diferentes aspectos. «Habrá de todo, desde adiestramiento básico, en puente, de timoneles o maniobras de remolque», concretó Tórtola. Otros aspectos que abordarán en los entrenamientos están enfocados en el aprovisionamiento en el mar, que consistiría en hacer traspasos de provisiones entre barcos, o la comunicación entre los buques. A pesar de la capacidad que tienen las embarcaciones para hacer recorridos largos sin necesidad de pasar por puerto, está previsto que las maniobras de adiestramiento se alarguen un día.

La construcción de las patrulleras forma parte de un acuerdo que alcanzó Navantia con la Marina de Arabia Saudí. La empresa pública adquirió los buques y se los cedió a la Armada española, que se hace cargo de su uso. El pacto que alcanzó Navantia con Arabia Saudí incluía el adiestramiento de una dotación de la Marina arábiga.

Los primeros alumnos llegarán a Ferrol en 2021. «Van a usar las patrulleras para sus entrenamientos, alternándose con los de los de la Escuela de Especialidades de la Estación Naval de la Graña. En todos los casos irá comandado por la Armada española», explicó el teniente de navío Tórtola.