El barco «Valencia Filgueira» será reparado en los astilleros de Outes

El pesquero muxián Valencia Filgueira, que se fue a pique el pasado sábado en el puerto de la localidad después de que fuera alcanzado por varias bombas de palenque, ya está reflotado y preparado para ser remolcado a los astilleros Abeijón Hermanos, de Outes, para su reparación. Los técnicos de esta empresa fueron los encargados de tapar los huecos ocasionados por los cohetes y ayer sólo esperaban el permiso de Capitanía Marítima para remolcar la nave hasta sus instalaciones, ya que el barco, aunque flota no puede desplazarse por sus propios medios.

Aunque en principio será el seguro de la compañía responsable de las bombas de palenque?-Pirotecnia Resúa- la que se haga cargo de los gastos ocasionados, tal extremo todavía no está absolutamente claro. El caso lo lleva el abogado de la familia de Manuel Valencia Filgueira, propietario del pesquero.

Durante todo el sábado y buena parte del domingo, fueron centenares los curiosos que se acercaron al puerto de Muxía para ver los trabajos de reflotación del pesquero.

Aún no se sabe cuánto costará toda la operación, pero no será barata. Ayer, un equipo de técnicos se desplazó a Muxía para inspeccionar el estado de los motores. Será tras su valoración cuando se pueda hacer una estimación sobre el coste de la operación mecánica. Falta también la inspección del barco, fuera del agua, en los astilleros, para que los profesionales determinen qué reparaciones precisa.

Con todo, fuentes del sector explican que volver a dejar el Valencia Filgueira operativo no costará menos de 180.000 euros, eso aparte de los gastos de reflotar la nave y del dispositivo de emergencia desplegado para evitar fugas y contaminación en el puerto.

Se trata de una aproximación. La cifra final aún tardará días en saberse, al igual que el nombre de la empresa aseguradora que se hará cargo de los gastos y de las pérdidas ocasionadas a los armadores, que tenían en el barco su medio de vida y con el que faenaban regularmente.

Tampoco se sabe todavía cuánto durarán los trabajos de reparación y cuándo podrá volver a la actividad extractiva.

El buque había regresado de faenar por última vez el pasado viernes por la noche y ya no volvió a salir al mar.

Hacia el mediodía del sábado, un problema durante el lanzamientos de las bombas de palenque durante la celebración de las fiestas de San Miguel (que se suspendieron), acabó con varios cohetes desviándose de su ruta e impactando en el pesquero, de casi 20 metros de eslora.

Al menos uno de los proyectiles impactó entre dos cuadernas del barco -las costillas que configuran el esqueleto del casco- haciendo un boquete de unos 15 por 15 centímetros, suficiente para que se llenara de agua en cuestión de minutos y se fuera al fondo.

Las labores de recuperación fueron igualmente veloces. Los armadores se pusieron en contacto con los astilleros Abeijón Hermanos y sus empleados se desplazaron ese mismo día hasta el puerto de Muxía, con dos grandes grúas y un equipo de buzos.

Las labores de recuperación comenzaron a las seis de la tarde y a las dos de la madrugada del domingo el buque se encontraba ya en seco.

El buque fue construido en Noia en 1995. Se trata de un pesquero de madera dedicado al palangre de fondo y con una potencia de 222 caballos y motores de gasóleo.