La huella de Manuel Facal, cada vez más presente en Carballo

Ser profeta en su tierra resulta en muchas ocasiones una tarea complicada para los artistas -sobre todo en vida-, pero no para Manuel Facal Ponte, el carballés que además de pasear sus creaciones por muchos países ha dejado ya una importante huella en su localidad natal. Las esculturas de las rotondas de A Ponte da Pedra y del polígono de Bértoa son sus creaciones más visibles, pero las obras de este artista, conocido como grabador Facal, está presente en otros espacios de la localidad, como el Fórum Carballo, que alberga desde hace pocas fechas su donación más reciente, una serigrafía de grandes dimensiones.

Lejos queda ya 1988, año en que Facal hizo entregó al alcalde de la época, José Sánchez Vilas, de una pintura para la casa consistorial. La obra se pudo ver en el edificio hasta que fue retirada para realizar unas obras y quedó condenada al ostracismo durante una larga temporada. Recuperada en el 2004 por el actual regidor, Evencio Ferrero, vuelve a ocupar un lugar de privilegio dando la bienvenida a todos los que ascienden por sus escaleras principales.

También en el 2004 y para dar vida a la rotonda de la avenida da Ponte da Pedra, Facal ideó una escultura de más de 7 metros de alto -materializada en colaboración con la empresa Talleres López- que se convirtió en un referente en la localidad -no sin cierta controversia- y que no tardó en tener continuidad. Tres años después, O Escalo se abría paso hacia el cielo con sus más de 13 metros de altura desde la rotonda de acceso al polígono de Bértoa y volvía a hacer más que visible el vínculo de Facal con Carballo.