La Costa da Morte tiene aún 16 parques eólicos sin ejecutar

La Costa da Morte tiene 16 parques eólicos con la tramitación en marcha o ya terminada, algunos desde hace casi una década, y los más recientes poco más de año y medio. Pero ni unos ni otros avanzan, y el mapa eólico comarcal, que representa un 10% del total gallego en número de aerogeneradores, está estancado desde hace cuatro años, cuando terminaron las obras del de Fontesilva, en Coristanco.

Esta situación no es exclusiva de la Costa da Morte, aunque su incidencia es mucho más elevada que la de otras zonas, por la mayor densidad de proyectos, que de llevarse a cabo aportarán cantidades millonarias a las arcas municipales. En efecto, las demoras son comunes: ayer se conocía que Galicia solo estrenó el año pasado 2,65 megavatios, ni siquiera la potencia de uno solo de los nuevos aerogeneradores, que superarán con creces los tres megavatios. Además, el Consello da Xunta autorizó el jueves los tres primeros parques del concurso eólico, «activando medidas para facilitar o desenvolvemento dos sector», según una nota del Gobierno autonómico. Pero, de momento, ninguno de esos tres nuevos parques caen por la Costa da Morte.

Las causas de este parón, impensable hace un lustro dada la celeridad de las peticiones de los parques, son variadas, pero casi todas derivan de un cambio en el marco legal que afecta a las energías renovables con menos ingresos directos que hasta ahora y más tributos, tanto al Estado como a la Xunta. Y también para los concellos, porque la mayoría han modificado las respectivas ordenanzas del ICIO para poder cobrar una cuota que, de media, está en el 4 %, convenios al margen. Al mismo tiempo, las condiciones de acceso a los créditos se han endurecido, al no tener garantizada la misma rentabilidad que hasta ahora.