El Bergan no logra la ansiada victoria pese a ir ganando 4-1 en el minuto 81

Hace ahora cinco meses y medio, el Bergantiños viajaba a Langreo tras ganar dos partidos seguidos por primera vez en el curso. Allí, en el minuto 90 estaban cosechando la tercera consecutiva, que los dejaba en la octava plaza y que confirmaba el despegue de los rojillos. Pero entonces llegó un penalti muy dudoso en una jugada a balón parado. Y todo cambió. Ni victoria ni despegue. El conjunto carballés entró en una espiral de negatividad y depresión que ya ha propiciado el descenso de categoría y que no parece tener fin. Así quedó demostrado, otra vez, contra el Langreo y, de nuevo, por culpa de dos goles en el tiempo de descuento. Ni con un 4-1 favorable en el minuto 81 fue capaz de ganar un partido este Bergantiños.

Y eso que parecía el día. El Langreo, que se juega el descenso, compareció en As Eiroas con la ambición e intensidad de quien participa en un amistoso de pretemporada. Y el Bergan lo aprovechó. Primero Pedrosa, tras una recuperación de Julen y su posterior pase al espacio a Garrido, que tras una gran carrera cedió al lucense para que la colocase en el lateral de la red desde el pico del área. No había pasado ni un minuto, pero tampoco sirvió de despertador para los visitantes, que aún así alcanzaban el área local sin demasiado esfuerzo.

Consciente de esa debilidad en feudo propio, Durán estuvo más insistente que nunca en la presión ofensiva y a partir de esa demanda llegó el segundo. Chapu se llevó con fuerza un duelo individual en la frontal del área y batió a Adrián Torre con la tranquilidad de un ariete. Era el 2-0, pero la renta ya podía ser mayor de no ser por el meta rival.

Con este tanto sí que llegó la reacción de los asturianos, que se animaron al ver la facilidad con la que creaban ocasiones de peligro. Tomé salvó de la línea un cabezazo, pero en la jugada siguiente Brunet no pudo hacer lo propio con otro remate de Chus Ruiz. Ante tal desbarajuste, el técnico local decidió tomar cartas en el asunto a falta de cuatro minutos para el descanso. Sacó a Palomares, desquiciado con el colegiado y los rivales, pero también a Julen y a Meixús, que estaban haciendo una gran labor en el aspecto ofensivo.

El comienzo de la segunda parte ya se pareció más a un partido de esta categoría, con dos equipos sin conceder casi nada. Y en esas, la moneda volvió a caer cara para el Bergan. Un inteligente Espeso provocó un tonto penalti con el que Remeseiro anotó el 3-1. Tomé volvió a salvar otro gol visitante y Canedo se lució ante Poveda, pero el partido estaba donde los carballeses querían. Y al contragolpe, con Josiño, sentenciaron, o eso parecía. Hasta el minuto 81 tuvieron, incluso, algunas opciones para quedarse solos delante del portero, pero los errores en el primer pase impidieron ampliar la ventaja.

No obstante, llegó el 4-2 en una falta sin aparente peligro. Seguía sin olerse el drama, porque Sito pudo hacer el quinto, que lo evitó Adri Torre, pero un penalti de Remeseiro en el minuto 90 sí lo cambió todo. Con el 4-3 y ya en el descuento, As Eiroas sabía lo que se venía. Y se vino. No le hizo falta al Langreo más que poner la tercera o cuarta marcha para alcanzar un punto al que ya habían renunciado en el minuto 1. Pero ni así gana este Bergan.

«Con 2-0 y con 4-1 seguí teniendo la sensación de que nos iban remontar» 

José Durán protagonizó tras el partido una de las ruedas de prensa más emotivas en As Eiroas. El lucense reflexionó sobre la realidad de un equipo al que resaltó que defenderá dignamente hasta que acabe la temporada. «Nunca volveremos a tener un partido tan de cara como este en cuanto al resultado. Pero íbamos 2-0 en el minuto 15 y tenía la sensación de que nos marcarían dos o tres. En el 81 íbamos 4-1 y lo mismo. No lo teníamos controlado en ningún momento. Podían hacernos gol en cualquier jugada. Al rival solo le quedaba decidir cuándo iba va a meter y te iba a reventar el partido. Nos queda grande la categoría, es la realidad», comentó. Sobre la triste situación, dijo: «Es una experiencia brutal, yo hay noches que no duermo pensando en como ayudar al equipo y nada da resultado. Pero vamos a salir mejores, aprendemos mucho».

El entrenador del Langreo, Javi Vázquez, fue muy crítico con su equipo, pese a lograr la remontada. «Nos hemos llevado demasiado, más de lo que merecíamos, ha sido un desastre de partido», comentó sobre los suyos. «Pueden no salirte las cosas, pero no se puede salir a un campo de fútbol como salimos hoy, y menos tal y como estamos. Si nos enfrentamos a un rival que se está jugando algo, el partido acaba 4-1».