Baio y Sofán disputan el reinado del fútbol da Costa

Ha llegado el día. Baio y Sofán disputarán este domingo el partido que anhelan todos los clubes de la Costa da Morte, la final de la 58ª Copa da Costa masculina (18.00 horas, A Fontenla). Un encuentro con muchos asuntos por resolver. Principalmente, ambos conjuntos quieren pagar sus deudas con este torneo. La de los bermellones, que tendrán las bajas de Canedo y Godi, es escasa, pero dolorosa, pues en el campo de su rival de esta tarde, en el Platas Reinoso, cayeron por penaltis contra el Xallas en el 2018. Un verdugo contra el que ya obtuvieron revancha en semifinales y en cuyo campo quieren levantar su primera y muy ansiada Copa da Costa.

La cuenta por pagar de los blanquiazules es más amplia. Una de las entidades con más historia de todo el fútbol comarcal que no ha logrado reflejarla en la vitrina copera. Fundado en 1964, el CD Baio tuvo que esperar hasta 1983 para disfrutar de su primera final y saborear su primer título, contra el Coristanco. No obstante, ahí empezó la mala dinámica de los blanquiazules en el encuentro decisivo. Cayeron en 1984 contra el Laxe; en el 2004, contra el Atlético Mineiro y en el 2005 frente al Dumbría. Más o menos cada dos decenios, el Baio pisa una final y después de tres varapalos, ya quieren cantar victoria. Para ello, hoy no podrán ayudar Damián, Mario, Javi Suárez, ni, posiblemente Braian.

Para llegar hasta aquí, el Sofán eliminó al San Lorenzo (0-5), al Ponteceso (1-2) y al Xallas (1-1 y 0-3). El Baio dejó por el camino al Fisterra (3-1), Cabana (1-2), Corcubión (1-5) y Dumbría (1-0 y 0-1). Los carballeses jugaron uno menos por la imposibilidad del Buño de reunir suficientes jugadores durante la semana. El noveno de Preferente contra un descendido por culpa de los arrastres en Primera. Un proyecto ejemplar de crecimiento durante los últimos años contra el decano del balompié de la Costa da Morte. Paulo contra MC o Parafita contra Bieito. Mire como se mire, un auténtico partidazo. El reinado del Fisterra llega a su fin y A Fontenla encumbrará un nuevo rey del Fútbol da Costa.

Félix García (Baio): «É unha recompensa ó gran traballo pese ós malos resultados» 

Félix García recogió el testigo de Pablo Torreira el verano pasado, con muchas bajas y después de que el club rozarse el quedarse sin competir. «Foi unha semana normal, aínda que onte adestramos na Fontenla e a verdade é que non hai excusa para non facer un bo xogo», dice, aunque admite «que as categorías están para algo e no partido é probable que se note durante algúns momentos porque teñen máis experiencia e máis ritmo, aínda que nós vimos nunha gran dinámica e moita ilusión». «Son moi pesado dicíndolles que gocen da semana e tamén do ambiente da final, porque vai estar o pobo enteiro», cuenta Félix, que se muestra muy orgulloso de los suyos: «É unha recompensa ao gran traballo que fixeron estes rapaces sen ver bos resultados. Porque a falta dun mes e medio de competición houbo un cambio de chip e notouse moito, pese a que os arrastres nos condenaran».

Pablo Torreira (Sofán): «Soy el que peor lo va a pasar, allí dejé amigos» 

Pablo Torreira dirigió al Baio entre el 2018 y el 2022. «Dejé amigos porque fue una gran experiencia en las buenas y en las malas. Honestamente soy el que peor lo va a pasar durante la final», explica entre risas. «Sé como se crecen esos jugadores cuanto más complicadas son las cosas y están aquí por méritos propios», advierte. Espera un partido «muy igualado, pero de buen fútbol», por la idea de ambos. También reiteró la necesidad de gozar el momento: «Es muy complicado llegar hasta aquí. Mira cuánto ha progresado este club en los últimos años y aún así solo ha jugado una final».