Un caballo, dos ponis y dos mulas para el control ecológico del Castro de Montes Claros
A Laracha
La iniciativa es fruto de la colaboración entre el Concello de A Laracha, y la asociación Pura Raza Cabalo Galego e Poni Club Galicia
03 Dec 2024. Actualizado a las 17:13 h.
El recinto de Castro de Montes Claros de A Laracha cuenta desde esta semana con cinco habitantes: un caballo de pura raza gallega, dos ponis mini shetland y dos mulas nacidas de un poni albino. Los équidos estarán de manera permanente en el yacimiento y serán los protagonistas del novedoso sistema de control ecológico y sostenible con animales de pradería.
La iniciativa es fruto de la colaboración entre el Concello de A Laracha y la asociación Pura Raza Cabalo Galego e Poni Club Galicia, formalizada esta misma semana en el convenio rubricado por el alcalde, José Manuel López Varela, y el representante legal de la asociación, Xacobo Pérez Paz.
En virtud del acuerdo, Poni Club Galicia, que previamente efectuará la selección de los cinco animales, los cederá conservando la propiedad, mientras el Concello se compromete a garantizar en todo momento el cuidado y la alimentación, además de los tratamientos sanitarios precisos y la custodia de su bienestar.
La estructuras necesarias para posibilitar la estancia del caballo, los ponis y las mulas fueron construidas recientemente por el Concello a través del obradoiro de empleo, utilizando como material la madera para una mejor integración en el entorno. Junto a la entrada se acotó una zona que dispone de una marquesina y será el principal espacio de descanso y estancia de los équidos. Los mamíferos podrán moverse con total libertad en las parcelas que albergan el yacimiento.
«Ademais, nos accesos construíronse abeiros coa dobre función de delimitar o castro para que os animais non saian do recinto e, ao mesmo tempo, permitir que as persoas que acudan visitar o xacemento poidan protexerse e evitar o contacto cos équidos se así o desexan», según explicaron fuentes municipales.
El Castro de Montes Claros se convierte así en uno de los primeros yacimientos gallegos en emplear este sistema natural para la limpieza, conservación y mantenimiento de este espacio. «Con esta novidosa iniciativa o Concello pretende continuar poñendo en valor o sitio mediante a súa mellor conservación diaria cun sistema que evita o emprego de medios mecánicos sobre o xacemento, favorece a recuperación da paisaxe tradicional e, ademais, supón un aliciente para atraer visitantes», indicaron desde el Concello.