El plan para el reparto de la mina de Meirama lleva 10 años enquistado

El Ayuntamiento de Cerceda y la multinacional Gas Natural Fenosa siguen sin ser capaces, diez años después de haber iniciado las negociaciones, de desbloquear el proyecto para repartirse el entorno de la antigua mina de Meirama, unas 613 hectáreas de terreno. Se trata de un proyecto tremendamente valioso desde el punto de vista medioambiental, patrimonial y económico, tasado en su día en unos 60 millones de euros, cuantía que se vería reducida hasta los 25 millones en caso de que no se ejecutase el polígono industrial previsto en las inmediaciones.

La regeneración del entorno que albergó en su día la antigua mina y el lago de As Encrobas supusieron un gran esfuerzo. Un megaproyecto de regeneración llevado a cabo por la compañía, propietaria de Lignitos de Meirama. En el 2007 arrancaron las conversaciones. El objetivo principal era reordenar los espacios, propiedad de Gas Natural Fenosa, una vez concluida la actividad extractiva de carbón en Meirama. Por aquel entonces, la crisis económica empezaba a dar señales de vida, aunque no se vislumbraba lo que sucedería después.

El equipo de gobierno local, encabezado por José García Liñares, buscaba la reordenación de la zona industrial, crear un eje productivo entre O Acevedo y Sogama y apuntalar la red de comunicaciones con enlaces con mesón do Vento, A-6 y la Autopista del Atlántico.

Propuestas

La primera propuesta consistió en la recalificación de los terrenos de la antigua escombrera (3,4 millones de metros cuadrados netos) para ser repartidos al 50%. Posteriormente, surgió una segunda posibilidad, con la que, en el 2010, se habría llegado a un principio de acuerdo. La compañía cedería al Concello 4 millones de metros cuadrados. A cambio, el Ayuntamiento se comprometía a recalificar 500.000 metros cuadrados que Fenosa destinaría a uso comercial, industrial, almacenaje y distribución (la compañía inició los trámites para construir dos polígonos en As Encrobas, en terrenos de su propiedad). De forma paralela, el Ayuntamiento recalificaría otros 3,4 millones de metros cuadrados, pertenecientes a una segunda escombrera, donde la gasista tenía intención de construir una planta de biomasa, que en principio debería estar operativa este año. Augas de Galicia se quedaría como titular del lago de As Encrobas y, por último, se había diseñado un parque tecnológico que quedó en stand by, con lo que el terreno se repartiría entre Gas Natural (500.000 metros cuadrados) y el Concello (1.000.000). El consistorio pretendía desarrollar en este suelo un enorme complejo ambiental, deportivo y lúdico. El pazo de Gontón pasaría a ser propiedad definitiva de Fenosa.

Todo estaba pactado en aquel 2010. Pero todo se fue al traste porque, según apuntaron desde el Concello, Gas Natural Fenosa pretendía retirar del preacuerdo, de forma unilateral, a última hora y sin avisar, unos 400.000 metros cuadrados de terreno que en teoría deberían cederse al Ayuntamiento. El alcalde, José García Liñares, dijo basta y se levantó de la silla.

Desde entonces hubo varios intentos por retomar las negociaciones. A finales del 2015 parecía que el acuerdo estaba cerca. Pero el tiempo pasó y el reparto sigue sin hacerse y todo apunta que no se logrará, por lo menos a corto y medio plazo.

Así lo confirmó ayer el mandatario: «A última vez que se remitiu un correo electrónico foi en novembro de 2016 e nin sequera contestaron. Pola nosa parte o tema quedou decidido: se a empresa quere recuperar o acordo de 2010, perfecto. Todo o demais no ten sentido falalo», dijo.

El lago de As Encrobas pasará a ser de titularidad de la Xunta en mayo del 2018

Mientras que Fenosa y Concello mantienen las negociaciones paradas por el reparto de las 613 hectáreas que albergaban la antigua mina de carbón, el lago de As Encobras se ha convertido en foco de atención por varias cuestiones. La primera por su llenado, completado en el 2014, y su puesta en valor medioambiental, con una playa de unos 400 metros de longitud incluida. De hecho, tal y como avanzó el alcalde, el lago de As Encrobas pasará a ser de dominio público hidráulico en mayo del año que viene. De forma paralela, la Xunta, inició en el 2014 las obras para conectar Cecebre con As Encrobas, que permitirá garantizar el suministro de agua a la comarca coruñesa. Los trabajos consisten en la contrucción de una toma de agua, un falso túnel conectado a una cámara de válvulas y un bombeo provisional.

Pruebas deportivas

De forma paralela, el alcalde de Cerceda busca dar utilidad al lago y ya ha obtenido el visto bueno de las federaciones deportivas náuticas para que albergue futuras competiciones oficiales, de ámbito autonómico, nacional e, incluso, internacional. Los directivos de la federación española de piragüismo ya visitaron las instalaciones en tres ocasiones y han dado su visto bueno a la iniciativa. Ahora queda lo más importante: habilitar una partida de unos 4 millones de euros para la construcción de naves, casetas, vestuarios, accesos y todo lo imprescindible para que el lago acoja competiciones deportivas. No hay plazos concretos de ejecución a expensas de que las Administraciones insuflen el dinero necesario.