ESPECIAL TURISMO | Laxe aúna paraísos costeros con interiores, miradores envidiables, historia y arquitectura
13 Jul 2023. Actualizado a las 11:52 h.
Laxe es una pequeña Costa da Morte en sí misma, pues aglutina historia, paisajes vírgenes y rebosantes de naturaleza, playas paradisíacas, rutas muy apetecibles, una gastronomía única y lugares tan peculiares como los Penedos de Traba y Pasarela, que demuestran que también lejos del mar hay belleza en la comarca. Declarados Paisaxe Protexida, estas originales formaciones graníticas culpables de múltiples estudios, son uno de los principales atractivos de la localidad que va sobrada de esta cualidad. Todo depende de lo que busque el forastero.
Si demanda turismo de sol y baño, hay una amplia oferta: la Playa de Laxe es más tranquila, mientras que las de Soesto o Traba atraen más al surfista.
Para el que quiere empaparse de historia, no tiene más que darse un paseo por el núcleo urbano, pasando bajo la Casa do Arco, del siglo XV o visitando el Museo del Mar y el Arquivo Vidal. Para los amantes de la arquitectura, la iglesia de Santa María da Atalaia o el templo dedicado a Santiago en Traba son joyas. Para el deportista hay grandes rutas y para el fotógrafo, inolvidables atardeceres. Como los que se pueden captar en el entorno del faro, en donde hay un buen espacio para hacer una comida inolvidable.
El secreto
Soesto es uno de los mejores lugar para apreciar el mar de ardora.
La leyenda
Dice una vieja historia que bajo la hermosa laguna de Traba está hundida la ciudad de Valverde debido a un castigo divino impuesto por no recibir como se merecía al Apóstol Santiago.
PARA NO PERDERSE
Faro de Laxe. Imponente y cuidado. Con la escultura de A Espera muy cerca.
Praia dos Cristais. Un lugar mágico.
Santa Rosa. Una pequeña ermita que ofrece una gran panorámica.