Javier Vázquez, en el podio de los gaiteiros
Muxía
«Só o feito de poder participar foi para min o maior premio», dice el muxián
11 Aug 2015. Actualizado a las 05:00 h.
Después de que figuras de renombre como Carlos Núñez o Edelmiro Fernández pasaran por el concurso de gaita Mac Crimmon, el muxián Javier Vázquez ha logrado el pasado sábado un segundo puesto de este conocido certamen, del que el asturiano Álvaro Álvarez ha resultado vencedor.
El concurso se ha desarrollado en el marco del Festival Intercéltico de Lorient, en la Bretaña francesa. Javier Vázquez señalaba recientemente la gran responsabilidad que sintió cuando le comunicaron que él sería uno de los cuatro participantes gallegos del concurso. A día de hoy [ayer], y tras lograr un magnífico resultado señaló: «Para min participar foi xa o maior premio; o resultado, nestes eventos tan importantes, é totalmente secundario».
Durante su intervención en el certamen, Vázquez interpretó varias piezas de hasta tres tipos de gaita diferentes: la gallega, la asturiana y la bretona: «Quizais a que me resultou máis complicada foi a asturiana, pero máis que nada pola falta de práctica, xa que en Galicia non se toca moito». El esfuerzo que supuso prepararse para la competición, fue notable, ya que el muxián dedicaba «na medida do posible e se o traballo mo permitía» unas dos horas diarias de ensayo para ponerse a punto. «Ademais, esíxeste a ti mesmo aprender outro tipo de música, non cinguirte exclusivamente á galega, polo que é bastante enriquecedor para min como músico». El esfuerzo ha sido más que recompensado con el segundo puesto que se lleva para Muxía.
Más allá de los buenos resultados, Javier Vázquez destaca haber sido partícipe de un ambiente inmejorable, entre músicos de muy diversas procedencias, muchos de ellos con una carrera ya consagrada. «Neste festival podes ver unha unión espectacular dos gaiteiros e da música folk», señaló el de Muxía, que se muestra muy agradecido por haber conocido a «tanta xente do mundo da gaita, que son moi grandes como profesionais, pero tamén como persoas».
Sobre la repercusión laboral de la que pueda beneficiarse tras participar en el sonado certamen, Vázquez ve muy complicado dedicarse profesionalmente a la música, ya que es un sector que se ha visto altamente perjudicado por la recesión económica. «A música é a miña paixón, pero hai que ser conscientes da realidade na que vivimos; na que vivir da música é un soño ao que só uns poucos poden aspirar», afirmó el intérprete, que señala lo «sacrificado» que puede llegar su pasión por la música, a la que destina gran parte de sus ratos libres.
El próximo viernes retomará su rutina en Ibiza, sin más cambios que el recuerdo imborrable de esta experiencia. «Seguirei coa vida que levaba ata o de agora: co meu traballo nunha central térmica en Ibiza, as clases de gaita que imparto e, sobre todo, seguirei cultivando a miña paixón por este instrumento», señaló el muxián.