La Voz de Galicia

Alejandro Fernández vuelve a la ciudad en julio

A Coruña

Las entradas para el concierto del cantante mexicano se pondrán a la venta el 5 de marzo

20 Feb 2018. Actualizado a las 10:30 h.

El Coliseo continúa con su saga de apuestas seguras y, previsiblemente, registrará otro lleno absoluto el próximo 25 de julio, miércoles de la festividad de Santiago Apóstol, con la visita del cantante mexicano Alejandro Fernández.

No hace falta echarle mucha imaginación para aventurar el éxito de esta cita. Basta con remitirse a las tres anteriores veces que estuvo en la ciudad -en el 2006, el 2008 y el 2014- con registros de entradas superiores a los 6.000 asistentes en cada concierto.

El mexicano viene presentando su disco Rompiendo fronteras, que da título también a la gira que le llevará por toda España y que arranca en Madrid el 18 de julio para continuar por Murcia, Santander, Fuengirola, Granada y Las Palmas de Gran Canaria. Estas son, al menos, las fechas confirmadas a día de hoy, aunque la promotora asegura que habrá más conciertos de Fernández en España este verano.

Las entradas se pondrán a la venta el próximo 5 de marzo a través de las plataformas clicktaquilla.com y ticketea.com, aunque todavía no ha trascendido el precio de las mismas.

De todas maneras es de suponer que desaparecerán rápido. La última vez que actuó en el Coliseo, el 17 de julio del 2014, ofreció un recital de cerca de dos horas en las que cambió un elegante traje gris con el que cantó sus baladas por el traje de charro y los mariachis para su repertorio más movido. En total, más de 6.000 personas las que asistieron a aquel concierto. 

De tal palo, tal astilla

Y es que le viene de casta, porque ya su padre, el gran maestro de las rancheras Vicente Fernández, actuó en el verano de 1974 en la ciudad, más concretamente en el Palacio de los Deportes, agotando las 5.500 entradas que se habían puesto a la venta. Unas cifras de auténtico récord para la época. Tanto es así, que ante la avalancha de gente que se quedó en la puerta del recinto sin entrada se improvisó un segundo pase para el que también vendió todo el aforo.


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