Avalancha solidaria para los sin techo

Los coruñeses se han volcado con las peticiones de ayuda que en los últimos días entidades y personas particulares han lanzado a través de canales oficiales, redes sociales y medios de comunicación con el objetivo de hacer frente al coronavirus. Los responsables del Ayuntamiento de A Coruña confirman que la respuesta de la población a sus llamamientos ha sido «impresionante» y que la solidaridad de las empresas y ciudadanos «fue casi inmediata», especialmente para dotar con todo lo necesario al pabellón de Riazor, convertido en alojamiento provisional para personas sin hogar.

La concejala de Benestar Social, Yoya Neira, asegura que han recibido multitud de donaciones anónimas de particulares, con pequeñas cosas que contribuyen al bienestar de los usuarios. Les han llegado sábanas, almohadas, fundas de almohadas, toallas, mantas, jabones de mano... «Un empresario, de la firma Galia Vending, nos trajo también una máquina de café, como las que suele haber en las empresas. Lo mejor es que pueden usarla de forma gratuita, sin meter monedas para poder tomarse un café o un chocolate», explica la concejala. Grumico aportó tres mesas de pimpón; Gasthof, bollería y gel alcohol; Reto llevó al pabellón de Riazor bizcochos tipo panettone; Coca-Cola aportó refrescos y zumos; Estrella Galicia, varios palés con botellas de agua, y la empresa Representaciones Sanjurjo, auriculares.

Un ropero y termómetros

También la institución benéfico social Padre Rubinos ha aportado su granito de arena y montó en Riazor un ropero. «Lo han hecho con tanto esmero y cuidado que está precioso. Las prendas incluso están ordenadas por tallas y colores», comenta Yoya Neira. En el listado de colaboraciones también está el colegio de farmacéuticos, cuyo presidente ha llevado termómetros. También el colegio de odontólogos se ha volcado con la gente que menos tiene y varios voluntarios revisan las bocas de los acogidos en el pabellón. Capítulo a parte merecerían los voluntarios y los médicos que están haciendo el triaje encabezados por la doctora Belén Iglesias.

El Ayuntamiento también ha trasladado al pabellón de Riazor tres televisores para que los usuarios se distraigan durante el período de reclusión y, además, los periódicos que recibían diariamente las diferentes concejalías se han redirigido hacia las instalaciones de Riazor. «A través de la red de bibliotecas municipales también podemos ofrecer libros de lectura. Incluso se admiten peticiones», explica Neira. Destaca que el objetivo último es que la gente alojada «esté bien y con todo lo que necesite». En cuanto a la higiene, desde el gobierno local confirman que las personas sin techo pueden ducharse y asearse a diario. Y, en relación a la alimentación, la concejala de Benestar Social aclara que han tenido que contratar un cáterin para dar de comer a los 33 usuarios actuales. «Se trata de la misma empresa que presta el servicio en el comedor social del centro cívico de Monte Alto», aclaró. En cuanto a los menús, Yoya Neira comentó que se preparan con el objetivo de que las personas que se ven obligadas a vivir en la calle puedan fortalecerse, ya que están más expuestos a padecer determinadas patologías por sus circunstancias. «Los expertos dicen que durante este tiempo podrán fortalecerse a través de la alimentación, el orden y las rutinas. Y, aunque las circunstancias son difíciles, por el momento no hay ningún problema de convivencia», confirma.

Los esfuerzos y donaciones siguen y en el parque de bomberos de A Grela, por ejemplo, hay un equipo que está generando hasta mil litros diarios de un desinfectante homologado, que ya están usando los bomberos, guardacostas y Protección Civil.