La actriz de Os Castros participa en la serie de Netflix «El desorden que dejas», protagonizada por Inma Cuesta y Bárbara Lennie
27 Dec 2020. Actualizado a las 05:00 h.
Estaba en el Gasthof de Cuatro Caminos. Sonó su teléfono móvil y en la pantalla vio el nombre de Amalia, su representante. Rodeada de unas amigas, fue consciente de que cabía la posibilidad de que esa llamada le fuese a cambiar la vida. «Me puse a gritar de alegría y la gente alucinó», recuerda Isabel Garrido Fernández, de 22 años. Lo que le comunicaron ese día es que, tras varias pruebas, había sido seleccionada para participar en la serie de Netflix El desorden que dejas, estrenada hace unas semanas y que está arrasando en audiencia. «Hice teatro, pero este es mi primer trabajo audiovisual. Cuando me dijeron que iba a trabajar con Inma Cuesta mi madre se puso a llorar. Soy muy fan y siempre que tuve dudas sobre si dedicarme o no a la interpretación veía La novia. Me costó asimilar que estaba en una serie de Netflix con Inma y Bárbara Lennie, y al principio lloraba de emoción por las noches. Las tienes endiosadas y, desayunando con ellas, te das cuenta de que son personas normales, como todos, y te cuentan cosas que les pasan. Pero es un sueño estar a su lado», reflexiona esta joven que tenía bastante claro desde que era niña que lo suyo era ser artista. «De pequeña quería ser actriz, peluquera o presentadora de Caiga quien caiga. Este programa se acabó, lo de la peluquería lo deseché y...», comenta sonriente.
Muy de Os Castros
Estudió en el Sal Lence, en el Anxo da Guarda y en el instituto Monte das Moas. «Soy muy de Os Castros», reconoce. Dice que siempre fue «el perejil de todas las salsas, como me dijo una profesora. Se empezó a formar en el mundo teatral en la escuela Casahamlet y en Noite Bohemia. Siendo una adolescente ganó el premio a la mejor actriz del certamen Candilejas del colegio Calvo Sotelo. Tras aprobar la selectividad se matriculó en la Escuela de Arte Dramático de Madrid. «Hice 4.º mientras grababa la serie», comenta entusiasmada. Isabel ha hecho feliz a su familia. «Mi madre es mi principal fan. A mí no me conoce nadie, pero a ella, que trabaja en el Abente y Lago, la paran por la calle para decirle que vieron a su hija. Mi abuelo, que es el hombre de mi vida, siempre me llevaba a las clases convencido de que su nieta iba a ser artista. Siempre me animó mucho», destaca. En cuanto contactaron con ella para el primer cásting se leyó el libro de Carlos Montero sin saber que daría vida a Nerea, una de las alumnas del instituto donde imparten clases las protagonistas de la trama. «En la prueba coincidí con Arón Piper y no lo conocía porque no vi Élite. Ahora mis amigas me preguntan cómo besa. La verdad es que él está acostumbrado a este tipo de escenas y me ayudó en todo momento para que estuviese más cómoda. Lo noté», recuerda.
Nuevos proyectos
En unos segundos te das cuenta de que es una chica extrovertida. De esa gente que parece que conoces de toda la vida al minuto de habértela presentado. Un encanto de persona. «No tengo doble cara, para lo bueno y para lo malo. Con el personaje que interpreto existen algunas similitudes, como que las dos vivimos todo con mucha intensidad. Lo que pasa es que ella lo expresa con rabia, porque es adolescente, y yo con llorera, pero también tuve 17 años», apunta. Charlamos en la terraza del Central Park en la plaza de Vigo. Es puntual. «Prefiero esperar a que me esperen. También me gusta conducir con la música a tope. Canto y grito mientras conduzco», confiesa esta joven de Os Castros que en estos tiempos que corren le sucede lo mismo que a todos los de su edad, «Me gustaría salir por el Orzán, ir a verbenas, a actuaciones del Combo Dominicano... Soy de ir a las fiestas del O Burgo o Vilaboa y hasta tengo fotos con los integrantes de la Panorama», confiesa Isabel, que pasa la Navidad en casa pero que ya está inmersa en nuevos proyectos de los que nada puede avanzar. Reconoce que es de la que piensan mucho las cosas y que es de las que se olvidan del cumpleaños de sus amigas. Así es Isabel Garrido, una actriz coruñesa que dará mucho que hablar en el futuro. «Vi la serie con mi madre, cada una en un sofá», reconoce con cierta timidez.